De inanes

No entiendo al gallego autopresidenciable y las gentes que me rodean, tampoco le entienden. Con esa mirada extraña, como perdida, mezcla de éxtasis y embobamiento, un tono de voz poco agraciado y monocorde que intenta, sin conseguirlo del todo, poner en voz lo que le escriben, día sí y día también exigiendo ser investido presidente salvador de la España de bien. Y no te dan los votos, corazón, no te dan. No hay siquiera algún familiar, los del PP son muy de familia, que le guarde afecto y se lo explique despacio, con cariño.

Ni se enteraba que el barquero que le paseaba era un narco, algo por todos conocido, ni ahora se entera, el inefable, que no posee el apoyo necesario. Que alguien se lo diga, hostia, por conmiseración cristiana. Primero debía ser investido porque era «su obligación» al ser su formación política la más votada, ahora debe presentarse a la investidura por que el rey de los españoles «se lo ha pedido» (sic). El rey a él, no él al rey. Y tan ancho.

Cómo es posible perder y hacer perder de manera tan inmisericorde el tiempo a la ciudadanía, a las instituciones y a quien en ellas trabajan por una irrealidad tan palmaria. Anda nuestro Francisco de Borja Sémper, el moderado, apelando como hiciera el De los Monteros, otro centrista, a la responsabilidad de los buenos barones socialistas. Si estuviera Borrell; pero anda el Alto Comisionado europeo de floricultor defendiendo el jardín europeo de los ataques invasivos de la jungla y sus bárbaros que quieren acabar con nuestra civilización. Los americanos «solo tuvieron que matar a cuatro indios» pero de moros y de negros hay un porrón y el Mediterráneo ayuda pero no lo suficiente. Contento se le ve a Josep con la victoria de la selección española femenina de fútbol: «nuestras mujeres están aprendiendo a jugar tan bien como los hombres, y eso, en sí mismo, ya es una muy buena noticia».

Claro que sí y después de cada gol se echan mano a los cojones, como su presidente de la Federación de Fútbol Española. ¿Serán que el par de cromosomas XY no da pa más?