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NUEVA DELHI

El G20 de Modi deja un reto a China y suaviza el texto sobre Ucrania

Las divisiones del G20 hicieron que suavizara el tono sobre la operación rusa en Ucrania, para irritación de Kiev y eludiera dar pasos para el abandono de los combustibles fósiles. La cumbre deja un desafío a China con la alternativa de EEUU, India y la UE a su Ruta de la Seda.

El líder panhindú Narendra Modi preside la mesa de los líderes del G20 en Nueva Delhi.
El líder panhindú Narendra Modi preside la mesa de los líderes del G20 en Nueva Delhi. (Ludovic MARIN | AFP)

El primer ministro indio, Narendra Modi, logró que los participantes en la cumbre de las principales economías mundiales adoptaran una declaración final del G20 en la que India se postuló como potencia mundial, pero donde las divisiones de intereses en el grupo sobre la guerra en Ucrania y las resistencias a la respuesta al cambio climático requirieron concesiones que suavizaron el documento.

Así, si bien la declaración exhortó a «todos los estados» a abstenerse del uso de la fuerza para actuar contra la «integridad territorial y la soberanía o independencia política de cualquier Estado», lo hizo sin condenar explícitamente la operación rusa en Ucrania, a la que en la cumbre del G20 celebrada en 2022 en Bali calificó como «una agresión».

Esta rebaja del tono irritó a Kiev. «Ucrania agradece a los socios que intentaron incluir una redacción fuerte en el texto. Al mismo tiempo, con respecto a la agresión de Rusia contra Ucrania, el G20 no tiene nada de qué enorgullecerse», señaló el portavoz del Ministerio de Asuntos Exteriores de Ucrania, Oleg Nikolenko.

Destacó, eso sí, el «sufrimiento humano y el añadido impacto negativo de la guerra de Ucrania» y citó el impacto en la cadena alimenticia, la seguridad energética, la estabilidad financiera, la inflación y el crecimiento, sobre todo en los países en vías de desarrollo.

Los líderes del G20 admitieron que hubo «consideraciones diferentes sobre la situación». Con todo la UE se mostró satisfecha por haber alcanzado un consenso y el asesor de seguridad nacional estadounidense Jake Sullivan opinó también que la redacción del texto es «un muy buen trabajo».

En lo que respecta al clima, los jefes de Estado del G20 ni siquiera lograron mencionar que tenían un desacuerdo sobre la reducción de los combustibles fósiles, como lo habían hecho sus ministros de Energía en julio en Goa. Pidieron «acelerar los esfuerzos para reducir la generación de energía a partir de carbón», sin recoger dispositivos de captura o almacenamiento de carbono, y excluyendo de facto el gas y el petróleo.

«Es un mensaje terrible enviado al mundo, en particular a los países más pobres y vulnerables, que son los que más sufren el cambio climático», lamentó Friederike Roder, vicepresidenta de la ONG Global Citizen.

Los países del G20, responsables del 80% de las emisiones de gases de efecto invernadero, se limitaron a declarar su apoyo al objetivo de triplicar la capacidad mundial de energía renovable para 2030.

DESAFÍO A PEKÍN

Por otra parte, al margen de la cumbre, India participó en un desafío directo a su rival geopolítico, China, con el que mantiene tensas relaciones, evidenciadas por la ausencia del presidente chino, Xi Jinping.

EEUU, la UE, India, Arabia Saudí, Emiratos Árabes Unidos, Alemania, el Estado francés e Italia anunciaron un megaproyecto de ferrocarriles, puertos y conexiones energéticas que pretende ser una alternativa a la Ruta de la Seda de China. Según Sullivan, también participarán Jordania e Israel.

El Corredor Económico India-Medio Oriente-Europa, del que Narendra Modi aseguró que «no tiene precedentes», se negociaba hace meses y se hizo público ayer con la firma de un memorando que plantea reconfigurar el comercio entre los países de Europa, el Golfo Pérsico y el Sur de Asia.

A la vez, pretende incrementar la cooperación energética y mejorar las conexiones eléctricas y de internet, con una tubería de hidrógeno verde y cables submarinos y terrestres.

Pese a lo ambicioso del proyecto, el memorándum no establece cómo se financiará ni un cronograma, que detallarán varios grupos de trabajo en los próximos dos meses

Con todo, tiene un gran significado político y supone una demostración de fuerza de Biden en su objetivo de contrarrestar la influencia de la Ruta de la Seda de China lanzada hace diez años.



Bharat Indiaren ordez? Izen hori erabili du Narendra Modik ofizialki, G20a baliatuz

Narendra Modi Indiako lehen ministroak G20ko goi-bilera baliatu du nazioartean Bharat-eko ordezkari gisa agertzeko. Honela identifikatu du bere burua idazki batekin eta hitzaldi batean. Bere herrialdea izendatzeko agintari indiarrak -ekitaldi ofizial batean- “Bharat” terminoa erabiltzen duen lehen aldia da, izena Konstituzioan agertzen den arren.

Panhindu mugimenduaren aurrerapauso bat adierazi du horrekin. “Bharat” hitzak antzinako sanskritozko idatziak gogorarazten ditu. «Hemendik kilometro gutxira, 2.500 urte dituen zutabe bat dago, eta bertan idatzita dago beti bermatzen dela gizateriaren ongizatea eta zoriona. Bharateko lurrak mezu hau eman zion munduari. Has dezagun G20ko goi-bilera mezu hau gogoratuz», esan du Modik.

“Bharat” hitzaren erabilera eztabaidagai izan da aste honetan Indian, Droupadi Murmu Asiako herrialdeko presidentearen G20ko afari ofizialerako gonbidapenek estatuburua «Bharateko presidente» gisa aurkeztu baitzuten. Gonbidapen horren ondoren, Sambit Patra BJPko bozeramaileak partekatutako beste dokumentu ofizial bat etorri zen. Bertan, Modi aste honetan Indonesian izan den Asean-India goi-bilerara joan zela baieztatu zuen, eta agintaria «Bharateko lehen ministro» izendatu zuen. Bi dokumentu horiek espekulazioak sustatu dituzte oposizioko alderdien artean, Estatuari izena aldatzeko Modiren asmoei buruz.

Eta espekulazio horien guztien artean, hainbat hedabidek eta sare sozialek iradoki dute India Bharat berrizendatuz gero, bere auzokide eta etsai Pakistanek India izena eskatzeko aukera izango zuela.GARA