El Laboral Kutxa acabó el martes su mejor temporada y ahora trabaja en los despachos para presentar la documentación y cumplir los requisitos necesarios para lograr una plaza en el Womens World Tour tras haber iniciado el proceso de solicitud consciente de que, si hay más de quince, las opciones de lograrla son pequeñas al tenerse en cuenta la puntuación de los dos últimos años.

El mánager del equipo, Aitor Galdos, explica a GARA que «se ha abierto el proceso. Estamos recopilando la documentación y, a partir de ahí, en un par de meses la UCI tomará la decisión y comunicará los equipos con licencia para el World Tour». Destaca la progresión del equipo, que acaba con 1.017 puntos entre los 25 mejores en el ránking UCI cuando el año pasado fue el 50º con 157, lo que le penaliza para entrar en 2024 en la élite.

«Hemos sumado casi diez veces más de puntos y a eso le unimos que la estructura es mucho más solida y el equipo da una imagen diferente. El ofrecimiento de las corredoras de nivel que hemos tenido este año para venir al equipo nunca había pasado. Tenemos 16-17 plazas, se han ofrecido ciclistas de calidad que podían reforzar el equipo, pero no hay sitio para todas», destaca.

Las exigencias para entrar en el World Tour son cada vez más altas y eso va a llevar a algunos equipos a renunciar o a fusionarse. El EF actual va a desaparecer y el que lo va a sustituir no va a entrar en el World Tour. El Liv y el Jayco se van a fusionar y otra unión entre Jumbo y Soudal podría dejar solo a uno de los dos en la máxima categoría a la que tienen derecho. Y no sería de extrañar que alguno más desaparezca porque el presupuesto de un World Tour va a triplicar al de hace unos años.

INVITACIONES

Habrá que esperar a ver si hay más aspirantes a las quince plazas del World Tour y, si no entra, Laboral Kutxa está bien situado para las invitaciones porque solo cuenta el ránking de este año. Cofidis y el Tashkent son los que tendrían derecho a todas las pruebas del World Tour, pero el conjunto uzbeco apenas compite en Europa.

Al siguiente, el Saint Michel, le puede bastar con ir al Tour, y delante del Laboral Kutxa quedan pocos más en el ránking. El ZAAF, con licencia española, no ha podido acabar la temporada y ya ha desaparecido como no van a seguir los demás, incluidos Bizkaia Durango y Sopela, que no pueden asumir las condiciones impuestas por la Española, que como a los chicos pide pagar el SMI y dar de alta en la Seguridad Social a las corredoras para tener licencia continental, cosa que otras federaciones no van a solicitar. Y en 2025 se crea la categoría Pro Team con un salario mínimo más alto para optar a invitaciones a pruebas World Tour.

Para 2024 están por delante del Laboral Kutxa también los continentales de UAE y Canyon, que no optan a invitaciones, y el Parkhotel, que es un equipo más de clásicas que de vueltas, que son las que quiere correr Laboral Kutxa, que aspira a debutar en Giro y Tour.

ANE SANTESTEBAN

Aitor Galdos entiende que tener a Ane Santesteban «debería influir en Giro y Tour, donde ha hecho décima y octava. No tienen la obligación, pero trabajaremos dentro y fuera de las carreras para que sea así. En el Giro puede haber de 22 a 25 equipos, en la Vuelta ha habido 25 y en el Tour 22. Es el objetivo. Este año había habido conversaciones con los dos, el Giro cambia de organizador y lo coge RCS, organizador de la carrera de los chicos, y es bastante factible que corramos las dos, aunque hasta que no lo digan no estará asegurado».

Galdos destaca que «la llegada de Ane refuerza el equipo, sales con garantías a ciertas carreras y la apuesta va en consonancia con la del equipo, a largo plazo. No queremos cargar sobre ella la responsabilidad de tener un objetivo de puntos. Llega en su mejor momento, con ofertas de equipos mejores que el Laboral Kutxa, sin garantías de calendario y eso lo hemos valorado. Refuerza su compromiso con el proyecto. Podía estar en cualquier equipo del mundo por lo que ha demostrado en el Giro, en el Tour y en toda la temporada y ha elegido estar con nosotros. Eso nos obliga más si cabe a mejorar como estructura y como equipo y rodearla de buenas corredoras, de un buen staff para trabajar todos juntos para intentar llegar a ese objetivo que es la categoría World Tour. Sin obsesionarnos, pero con la obligación y responsabilidad que cada uno tenemos en nuestro ámbito de trabajar al máximo y dar lo mejor».