Alegría incompleta en la novena jornada de la Liga F, que arrancó mal y fue remontando durante la tarde.

Muy celebrados los dos triunfos pero sobre todo el que lograron las azulgranas ante el Sporting de Huelva (1-0). No solo por lo mucho que se había hecho esperar el primero de la temporada en Ipurua, sino porque solo se había sumado un punto desde la segunda jornada, el calendario se complica sobremanera en las próximas con las visitas consecutivas a Levante y Barcelona y, sobre todo, enfrente estaba el colista.

Un Sporting de Huelva que se mantiene al fondo de la clasificación sin haber podido ganar aún un partido y que queda ahora a seis puntos del Eibar. Lo mucho que se jugaban los dos equipos quedó claro en el desarrollo de un encuentro en el que el Eibar quiso llevar la iniciativa pero que estuvo marcado por la intensidad y el poco entretenimiento. Lo importante era el marcador y Andrea Álvarez lo decidió a veinte del final. El Sporting tuvo tiempo para reaccionar pero no capacidad ante un rival que se defendió bien.

ALTERNATIVAS

Aunque el resultado final fue similar, el Athletic tuvo que sufrir bastante más en el Antonio Puchades ante un Valencia que se volcó en el área rojiblanca en la segunda parte.

El Athletic había sido mejor en la primera, en la que tomó el mando del partido y aunque no generó demasiadas ocasiones claras, la sensación de peligro en las inmediaciones de Enith fue constante. La recompensa llegó con polémica porque el estirón de Pujadas a la camiseta de Zubieta no llegaba ni a penaltito. Pero la árbitra lo pitó y tampoco era cuestión de desaprovechar un regalo que Pinedo convirtió en el 0-1.

Los cambios y la necesidad transformaron al Valencia en un segundo tiempo en el que a su rival le tocó sufrir mucho. Hubo asedio al área rojiblanca y Pauleta acabó por empatar con un zurdazo.

Parecía que el Athletic se resignaría a aguantar su puntito pero, viendo que el tiempo se agotaba, la gasolina escaseaba y el Valencia seguía volcado, David Aznar metió chispa arriba y acertó. En el 88, su equipo encontró un hueco y Zugasti hizo el 1-2 definitivo.

TODO MAL

Con el mismo marcador acabó el partido de Zubieta, a donde la Real regresaba necesitada de cariño y puntos tras el palo de Valdebebas. Pero la tarde resultó infausta y todo lo que podía salir mal, lo hizo. Empezando por el resultado, pasando por la imagen que no fue la mejor y acabando por las malas noticias en lo personal: Amaiur se resintió de su lesión a los diez minutos de entrar al campo y Jacqueline, titular por primera vez, vio la segunda amarilla en el 54, condenando a sus compañeras a jugar en inferioridad durante más de una hora.

La Real mandó en la primera parte pero el trabajo del Sevilla le restó fluidez y brillo y redujo sus ocasiones al mínimo. El partido se torció por completo a los diez minutos de la reanudación: Jacqueline vio la segunda amarilla y en la siguiente acción se adelantó el Sevilla, aprovechando la poca intensidad defensiva de las guipuzcoanas.

Entró Amaiur y se retiró de inmediato. Otro palo pese al que siguió peleando la Real, que empató con un gol de Jensen, justo antes de que el Sevilla volviera a adelantarse de nuevo y, también en el descuento, el larguero evitara que el testarazo de Jensen salvara un punto.