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LIGA ACB

Unicaja acaba por borrar a Bilbao Basket

Bilbao Basket no tuvo tiros sencillos. (OSKAR MATXIN | FOKU)

Jaume Ponsarnau declaraba en la víspera del partido ante Unicaja que el equipo malagueño «te puede sacar de tu juego a través de su poderío físico». El de Tárrega no podía haber hecho un vaticinio más certero de lo que fuera a suceder 24 horas más tarde. El poderío físico del conjunto que dirige Ibon Navarro desnaturalizó por completo el juego de los hombres de negro al punto de dejar el partido visto para sentencia al final del segundo cuarto.

De hecho, la segunda mitad fue mucho peor por parte de los dos equipos, en el que sumaron un parcial conjunto de 17-21. La dejadez malagueña resultó tal, que durante un instante en el arranque del último asalto los de Jaume Posarnau se acercaron hasta un 41-51 a falta de ocho minutos.

No obstante, a poco que a Osetkowski le dio por encadenar ocho puntos, la escuadra costasoleña se escapaba con un parcial final de 2-16, con el corolario de que Hlinason se torcía el tobillo izquierdo en el último minuto y se retiraba al banquillo cojeando.

PORCENTAJES PARA LLORAR

Un parcial de 13-27 del segundo cuarto dejaba el duelo al descanso con un 26-46 imposible de remontar salvo milagro. Siendo como es el de Ibon Navarro un equipo sin grandes estrellas, la escapada de Unicaja se fue gestando a través del colectivo, con la anotación repartida y una gran defensa, en un día para olvidar en el tiro exterior por su parte.

Pero es que el porcentual de tiro de los hombres de negro fue todavía más horrible, especialmente el tiro libre, incapaces de sostenerse por encima del 50% de efectividad: 9 de 20, por no hablar del 2 de 20 desde más allá de los 6,75 metros.

Los 43 puntos fueron la anotación más baja desde la creación de Bilbao Basket allá por el año 2000, pero la verdad es que las sensaciones fueron aún más espantosas que los propios números. Y ya son seis derrotas consecutivas.