Un punto que no alivia la clasificación, pero ayuda a seguir en clave positiva

El Amorebieta buscaba los tres puntos en el Carlos Tartiere para aliviar su delicada situación clasificatoria, pero se tuvo que conformar con uno en un partido en el que fue de menos a más. Y eso que las cosas no pintaron nada bien de inicio. Los de Jandro Castro encajaron muy pronto, apenas cumplido el tercer minuto de juego. Un centro de Viti por banda derecha fue cabeceado por Sebas Moyano, golpeando el balón en Jorge Mier antes de superar a Pablo Campos.

A partir de los diez minutos, El Amorebieta mejoró, adelantando la presión y complicando mucho la circulación de la pelota al Oviedo. Ello generó varias ocasiones claras gracias al buen hacer de Dorrio y Rayco. La más peligrosa la salvó el central juvenil local Jaime Vázquez, al evitar lo que parecía un disparo claro de Jauregi que llevaba camino de convertirse en el empate. Este llegó a la media hora en un saque de esquina. El ariete de Muxika se pudo desquitar así, fusilando a Leo Román al aprovecharse de una pelota suelta en el área carbayona.

El último cuarto de hora fue de dominio alterno, con acercamientos a ambas porterías. Tanto Borja Bastón como Edwards dispusieron de sendas oportunidades para inclinar la balanza a un lado u otro.

El Oviedo cambió el dibujo tras el paso por vestuarios a su tradicional 4-2-3-1 y, aunque mejoró, el Amorebieta se encontró muy cómodo a la hora de defender en las proximidades de su área.

No solo eso, también supo contragolpear, disponiendo de un inmejorable lance para subir el 1-2 en el luminoso. Tras un mal corner ejecutado por los anfitriones y posterior robo, el conjunto vasco se plantó en campo rival, circulando con criterio, hasta que Jauregi disparó al poste.

Reparto de puntos que no alivia demasiado al Amorebieta, pero que le permite iniciar con positividad una segunda vuelta en la que tiene que reaccionar para salir del pozo.