El pronóstico del joven de Villabona ha empeorado y se abre la vía judicial

No es seguro que el billabonatarra que sufrió el impacto de una bala de foam disparada por los ertzainas en los carnavales de Tolosa vaya a recuperar la visión del ojo afectado y los médicos han vuelto a retrasar la operación al menos hasta hoy. La familia ha interpuesto una denuncia y un juez de Tolosa ha iniciado una investigación de oficio.

La familia del billabonatarra que sufrió el impacto de una bala de foam en la madrugada del pasado lunes en Tolosa ha interpuesto una denuncia, por lo que el esclarecimiento de lo sucedido ese día ya no solo depende de la investigación interna de la Ertzaintza, sobre la que Lakua se cierra a avanzar detalles. Además, los profesionales médicos que atienden a la víctima de la carga policial son más pesimistas con su pronóstico, ya que han detectado nuevas lesiones en el ojo derecho del paciente.

La lesión ocular del joven de 16 años podría ser más grave de lo que se creía. Aunque en un principio las pruebas médicas apuntaban a que el joven no perdería la visión del ojo afectado, las últimas revisiones indican que tiene roto el cristalino, por lo que no se puede descartar esa opción, según informaron varios medios citando fuentes de la familia de la víctima. El cristalino es una estructura esencial para enfocar correctamente los objetos que están situados a diferentes distancias.

Además, la operación quirúrgica a la que el joven esperaba ser sometido ayer volvió a retrasarse por lo menos hasta hoy. Según explicó la familia, a pesar de que el coágulo que se le ha formado en el interior del ojo está reduciendo de tamaño, la hinchazón de la zona dañada por el proyectil de la Ertzaintza persiste, por lo que los médicos prefirieron esperar. Ayer le realizaron más pruebas y valorarán la opción de operar hoy.

El padre del chico, Jon Pozos, lamentó en unas declaraciones a “Berria” que su hijo, que también sufre de desprendimiento de la retina y de rotura del lagrimal y tiene quince puntos en el párpado y la ceja, tendrá «secuelas» a causa de la grave lesión.

COMPARECENCIA DE ERKOREKA

El martes la familia denunció públicamente en Villabona la actuación «violenta» de la Ertzaintza, y ayer dieron un paso más al interponer una denuncia. En el juicio, la familia se personaría como acusación particular. Además, un juez de Tolosa abrió una investigación de oficio sobre el caso.

Recibir «explicaciones públicas claras», como pidió la familia en la comparecencia del martes, parece la vía más corta para saber lo que sucedió, más corta que la judicial, al menos, pero lo cierto es que el Departamento de Seguridad de Lakua no está aportando información. Se limita a decir que espera a que la investigación interna que ha puesto en marcha la Ertzaintza dé resultados.

Puede que tenga que dar alguna explicación el día 28 de este mismo mes. Es el día que fijó ayer el Parlamento de Gasteiz para la reunión de la Comisión de Instituciones, Gobernanza Pública y Seguridad, en la que vicepresidente primero y consejero de Seguridad, Josu Erkoreka, debería comparecer a petición de Miren Gorrotxategi, portavoz de Elkarrekin Podemos, «para que explique la causa y las circunstancias de la carga policial en Tolosa, que ha causado lesiones de gravedad a un menor de 16 años».

Pero puede que no haya declaración alguna. Porque si se convocan las elecciones el 21 de abril, día al que apuntan varios analistas políticos, el Parlamento se disolvería el 27 de febrero, y no habría reunión ni comparecencia.

Lo poco que han explicado hasta ahora desde la Consejería de Seguridad es que los agentes que estaban de servicio en Tolosa cargaron con la intención de detener una pelea, en la que el joven herido ni siquiera estaba involucrado. Cabe destacar que los ertzainas decidieron disparar los proyectiles foam en la madrugada del lunes de carnaval, en una jornada festiva que reúne a mucha gente.