Asier Osambela, un tanque de 19 años como última aportación de Arrasate

En un curso en que tres canteranos se han asentado en el once Arrasate hizo debutar a otro que genera muchas expectativas: Asier Osambela.

Con el 41 a la espalda, Asier Osambela Larraya (nacido en 2004) debutó el sábado en Vallecas como jugador de Osasuna. No fue un estreno especialmente afortunado, porque estaba acabando de calentar cuando el Rayo empató, y ya con él en el campo el partido acabó con derrota (2-1).

Pero en su brazo derecho Osambela lleva un tatuaje en euskara y castellano que define bien su carácter: «Amore ematea ez da aukera bat». Desde Madrid viajó a Logroño para ayudar al filial en la lucha por la permanencia en Primera RFEF. Fue titular el domingo con un empate en Las Gaunas (1-1), donde jugó 75 minutos.

Arrasate no es amigo de debuts de cara a la galería: lo prueba el modo en que se asentaron en el once titular, nada más hacerlos debutar, Jon Moncayola o Aimar Oroz, y en esta temporada Jesús Areso, Jorge Herrando e Iker Muñoz. Supone un motivo extra para pensar que Osambela no será flor de un día. Se le suma la reciente renovación hasta 2026 (ampliable hasta 2028), con una cláusula de 6 millones de euros que subirá a 15 si se convierte en jugador de la primera plantilla.

Aunque no resulta lo habitual en un jugador tan joven, Asier Osambela destaca por su fortaleza física, especialmente por arriba, gracias a sus 186 centímetros y la capacidad de salto y choque. Se trata del segundo jugador que más duelos ha ganado en toda la temporada en Primera RFEF.

En el filial Santiago Castillejo lo emplea habitualmente como media punta, donde gana numerosos balones largos desde la defensa o el portero. La línea de ataque de Osasuna Promesas destaca por su altura, con el capitán Ander Yoldi, el lesakarra Jorge Agirre (ex del Sanse) y Max Svensson (cedido por el Deportivo, hijo del exguardameta internacional de balonmano que jugó cuatro años en Portland San Antonio) además de las peinadas de Osambela. No obstante, también se siente cómodo más atrás, como medio centro puro. Sus referentes son jugadores que han sido leyenda osasunista en ese puesto: Patxi Puñal y Oier Sanjurjo.

«MADE IN SUBIZA»

Hay más curiosidades en la vida y trayectoria deportiva del debutante. Es de Subiza, una minúscula localidad de Iruñerria (apenas 200 habitantes) que se ha convertido en «feudo» rojillo: el Subiza es «de facto» el tercer equipo de Osasuna, donde se curten a menudo los jugadores en el tránsito entre juvenil y Promesas.

El peculiar terreno de juego de Sotoburu resulta propicio para aprender «el otro fútbol». Su padre, Iñaki Osambela, jugó en el Subiza en Tercera. Y pese a ello, Asier Osambela no ha vestido la camiseta del equipo del pueblo. Y es que está en la cantera de Osasuna desde los diez años, adonde llegó desde el vecino Ardoi de Zizur.