Xi dice a Blinken en su visita a Pekín que los dos países deberían ser «socios, no rivales»
El presidente chino, Xi Jinping, dijo ayer al secretario de Estado estadounidense, Antony Blinken, de visita en Pekín, que las dos potencias económicas deberían ser «socios, no rivales», advirtiendo de que quedan «muchos problemas» por resolver en sus relaciones bilaterales.
En una muestra de la importancia que ambos países otorgan a su relación, el líder chino Xi Jinping recibió en el Gran Salón del Pueblo de Pekín al jefe de la diplomacia de Estados Unidos, Antony Blinken, que efectúa desde el miércoles su segunda visita a China en menos de un año.
Xi reconoció que los dos países «han realizado algunos progresos positivos» desde que se reunió con el presidente estadounidense, Joe Biden, a finales del año pasado, según el canal estatal chino CCTV. Pero «todavía hay muchos problemas que deben resolverse, y aún hay margen para seguir esforzándose», agregó.
«Propuse tres grandes principios: respeto mutuo, coexistencia pacífica y cooperación beneficiosa para todos», aseguró. «La Tierra es suficientemente grande como para albergar el desarrollo común y (…) la prosperidad de China y Estados Unidos. Cuando se resuelva este problema fundamental (…) las relaciones podrán realmente estabilizarse, mejorar y avanzar», insistió el presidente chino.
UCRANIA SOBRE LA MESA
Por su parte, Blinken pidió a Pekín que «no ayude a Rusia» y que no le suministre componentes que podrían ser utilizados en su guerra contra Ucrania.
«He dejado claro en las reuniones que China no puede ayudar a Rusia mediante el suministro de componentes electrónicos, mecánicos, electromecánicos y otros tipos de tecnología de Defensa», dijo Blinken en una rueda de prensa al término de su visita al país asiático.
Indicó igualmente que China tiene que «abordar» esta cuestión y no descartó sanciones a empresas chinas que proporcionen equipos a Rusia.
Se refirió también al mar de China Meridional, y aseguró que EEUU tiene que «garantizar la libertad de navegación», algo que «no es solo crítico para países como Filipinas sino para cualquier otra nación del Pacífico y del mundo».
«Hemos mostrado nuestra preocupación por las maniobras de China en ese mar. EEUU busca una desescalada, pero mantendrá su compromisos de seguridad», manifestó.
Su homólogo chino, Wang Yi, advirtió que las múltiples presiones ejercidas por Washington pueden provocar una degradación en las relaciones bilaterales. Las autoridades chinas están molestas con la presión económica de la administración Biden, que vetó las exportaciones de semiconductores al país asiático y amenaza con prohibir la plataforma TikTok si no corta lazos con su matriz china. Wang reconoció que las relaciones entre ambos países «estaban empezando a estabilizarse» tras la reunión en noviembre en San Francisco. «Pero se están creando y aumentando los factores negativos en la relación», añadió.
El canciller aseguró que China siempre «aboga por el respeto de los intereses fundamentales de cada parte» y pidió que EEUU «no rebase la línea roja» de Pekín sobre soberanía, seguridad y desarrollo.