La presidenta de la Confederación de Cooperativas de Euskadi (Konfekoop), Rosa Lavín, reclamó ayer una fiscalidad que favorezca la creación de este tipo de empresas, así como el desarrollo de las ya existentes. En vísperas de la asamblea anual que Konfekoop celebrará el próximo 22 de mayo en el Palacio Euskalduna de Bilbo, Lavín, junto con el director de la entidad, Iñaki Nubla, hizo balance del ejercicio «positivo» que fue 2023 para las cooperativas vascas y apostó por un sistema fiscal que las fomente y proteja.

Lavín señaló que la Confederación está colaborando con los representantes de Hacienda de las Diputaciones Forales de Araba, Bizkaia y Gipuzkoa para que se incluyan en la actualización de la normativa fiscal instrumentos que generen condiciones de financiación favorables para el fortalecimiento y competitividad de las cooperativas vascas. Según dijo, «hemos de dotarnos de un sistema fiscal adaptado que proteja, fomente e impulse el modelo cooperativo en toda su amplitud y que no obstaculice su desarrollo».

Para Lavín, «en momentos de enorme competitividad global, necesitamos que las empresas cooperativas, arraigadas en el territorio, que apuestan por la innovación y que contribuyen a la cohesión social, cuenten con un régimen fiscal que favorezca la creación de nuevas cooperativas y el desarrollo de las existentes». Los responsables de Konfekoop destacaron el crecimiento que las cooperativas agrupadas han experimentado durante 2023. «Hoy Konfekoop es una agrupación empresarial fuerte, que goza de buena salud financiera, robusta y consolidada», afirmó su presidenta.

Al cierre de 2023, había 1.288 cooperativas, 150 nuevas constituidas a lo largo del año, de las que 609 están en Gipuzkoa, 576 en Bizkaia y 203 en Araba. En total, daban empleo a 61.199 personas, con un aumento del 8% respecto a 2022, lo que supone 4.317 nuevos empleos. De esa cifra, entre 700 y 800 fueron empleos generados por las nuevas cooperativas constituidas, mientras que el resto erean puestos creados por las ya existentes.