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La orden de Biden sobre el asilo le aleja del ala demócrata más progresista


El ala más progresista del Partido Demócrata de EEUU se ha alzado contra el nuevo decreto migratorio firmado por el presidente, Joe Biden, y promete luchar desde el Congreso hasta que dé marcha atrás o apueste por otro que proteja a los inmigrantes y no limite el derecho de asilo.

La petición entre ese sector es unánime: esa orden no solo no va a mejorar la situación en la frontera porque no va a reducir la migración, sino que desmantela protecciones ya en vigor y no aborda el problema de raíz. Creen que la última iniciativa migratoria de Biden, la más restrictiva hasta la fecha, va contra los principios de su formación política.

La orden, que entró en vigor el martes de inmediato, permite a las autoridades deportar a quienes no cumplan unos estrictos estándares de asilo cuando se supere la cifra de 2.500 detenciones diarias en la frontera en una media de siete días, algo que en base a las últimas cifras está por debajo del flujo actual de cruces diarios.

La respuesta de algunos legisladores en su contra también ha sido inmediata. El representante de Texas de origen mexicano Greg Casar, junto a Pramila Jayapal, de origen indio, prepara un nuevo proyecto de ley que en lugar de penalizar a quienes llegan a la frontera busca reducir la necesidad de emigrar por la fuerza.

Tienen por delante el trámite en una Cámara de mayoría republicana, pero confían en sacar adelante una normativa que quiere revisar la política de sanciones, impulsar la cooperación regional y las causas de la violencia que expulsan a muchos ciudadanos de sus países.