GARA Euskal Herriko egunkaria

Les Républicains destituye a Ciotti como líder por querer pactar con la extrema derecha

La junta directiva del partido de la derecha gala Les Républicains accordó cesar a su líder, Eric Ciotti, por su deseo de pactar con la ultraderecha. Marion Maréchal, la «número dos» de Reconquête, rompe con el presidente de la formación, Éric Zemmour, para posicionarse junto al bloque que lidera su tía Marine Le Pen de cara a las legislativas.

Ciotti desató un terremoto al defender romper el cordón sanitario con los de Le Pen. (S. DE SAKUTIN | AFP)

La Comisión Ejecutiva del partido de la derecha tradicional Les Républicains (LR) decidió ayer destituir a su presidente, Éric Ciotti, por defender una alianza «antinatura» con la ultraderecha de Marine Le Pen para las legislativas anticipadas del 30 de junio y 7 de julio.

La decisión fue adoptada por «unanimidad» en la Ejecutiva de LR, la corriente política heredera de los expresidentes Charles de Gaulle, Jacques Chirac y Nicolas Sarkozy.

El pulso interno deriva del anuncio lanzado el martes por Ciotti de tejer una «alianza» con Rassemblement National (RN), la formación de Marine Le Pen, con la vista puesta en las elecciones anticipadas, un gesto que de facto implicaría romper el cordón sanitario que siempre ha marcado las relaciones con la ultraderecha en el Estado francés.

La tensión llegó a tal punto que los miembros díscolos de la cúpula convocaron para ayer una reunión extraordinaria de la que salió teóricamente una nueva dirección, con la hasta ahora secretaria general, Annie Genevard, y el cabeza de lista a las europeas, François-Xavier Bellamy, como líderes interinos.

«Al llevar a cabo negociaciones secretas, sin consultar a nuestra familia política y a nuestros militantes, Éric Ciotti rompe por completo los estatutos y la línea defendida por LR», expuso Genevard a la salida del encuentro, que no se celebró en la sede del partido, cerrada teóricamente por razones de seguridad -según la versión del propio Ciotti-.

«SIGO SIENDO EL PRESIDENTE»

La reacción de Ciotti no se hizo esperar y, al igual que había declarado antes del encuentro que este no tenía validez legal, repitió el mismo argumento una vez concluido. Así, consideró que supone una «violación flagrante» de los estatutos del partido e incluso planteó que «puede tener consecuencias penales». «Sigo siendo el presidente de nuestra formación», defendió.

MARÉCHAL APOYA AHORA A LE PEN

Marion Maréchal, la ‘‘número dos’’ del partido ultraderechista Reconquête (Reconquista), rompió ayer con el presidente de la formación, Éric Zemmour, para posicionarse junto al bloque que lidera su tía Marine Le Pen de cara a los comicios legislativos.

En una declaración a la prensa, flanqueada por otros tres eurodiputados de su partido que fueron elegidos como ella el pasado domingo (de un total de cinco), Maréchal criticó a Zemmour por querer presentar candidatos en competencia directa con la que llamó la «coalición de derechas» de Le Pen.

A su juicio, la decisión de Zemmour contribuye a «la división» de esa coalición que se está constituyendo entre la Rassemblement National, una parte de Les Républicains y ahora también una parte de Reconquête.



Macron se ubica como líder «frente a los extremos»

El presidente francés, Emmanuel Macron, protagonizó ayer una comparecencia institucional en la que se ubicó como el líder republicano «frente a los dos extremos» representados por la extrema derecha y la izquierda, tras su decisión de disolver la Asamblea Nacional gala después de las elecciones europeas y de convocar nuevos comicios, que presentó como «una respuesta democrática» al bloqueo que vive el Estado francés.

Macron destacó que el domingo «nuestros compatriotas expresaron sus inquietudes sobre seguridad, inmigración y poder adquisitivo» que no pueden ser satisfechas con un cambio de Gobierno.

En este contexto, presentó una batería de medidas que van desde la suspensión de la reforma constitucional para discriminar a los kanak en el censo de Kanaky, la prohibición de acceder a teléfonos móviles a menores de once años, la reforma del paro, la adecuación de las pensiones a la inflación o el impulso al acceso de la juventud a la vivienda o la construcción de ocho nuevos reactores nucleares. También reclamó un debate sobre la laicidad, uno de los tótems del republicanismo francés.

«No quiero darle las llaves del poder a la extrema derecha en 2027», proclamó, acusando a RN, el partido de Marine Le Pen, de «ambigüedad» ante Rusia y de querer que el Estado francés abandone la OTAN.

Junto a ello, anunció que no participará en la campaña, blindando su cargo de presidente de la República, ni debatirá con RN. «El presidente no está para hacer campaña», una tarea que corresponderá al primer ministro, Gabriel Attal. GARA