La cumbre sobre Ucrania acuerda un «plan de paz» con ausencias relevantes
La cumbre sobre Ucrania acordó una declaración que reclama seguridad nuclear, alimentaria y de tránsito marítimo, pero en la que Kiev no logró la adhesión a su «plan de paz» de actores relevantes del Sur Global. Además, el texto reconoce la necesaria participación de Rusia, excluida de la cumbre, sin detallar sus próximos pasos.
La cumbre que reunió en Suiza a cerca de un centenar de países y organizaciones internacionales para presentar una propuesta de paz para Ucrania, finalizó con una declaración conjunta que logró un apoyo amplio pero del que se desmarcaron varios países relevantes. Ucrania buscaba el mayor respaldo posible a una propuesta que reforzara su posición frente a Rusia en torno a un texto que reclama seguridad nuclear y de tránsito marítimo.
Entre los que se desmarcaron se encuentran India, Sudáfrica, México, Armenia, Bahrein, Indonesia, Eslovaquia, Libia, Arabia Saudí, Tailandia y Emiratos Árabes Unidos. Brasil, que asistió con «estatus de observador» no respaldó el texto y China declinó incluso acudir a la cumbre. El llamado Sur Global, una región que el presidente ucraniano, Volodimir Zelenski, quería ganarse, evitó darle este apoyo. Entre los 84 países que sí suscribieron el documento, además de sus aliados habituales, para Kiev supuso un logro la firma de Turquía.
La declaración defiende la integridad territorial y la Carta de Naciones Unidas como marco para «una paz duradera y justa». También insta a que las instalaciones nucleares de Ucrania queden al margen del conflicto y considera «fundamental la navegación comercial libre, plena y segura, así como el acceso a los puertos de los mares Negro y Azov». Exige también «el retorno de los niños ucranianos desplazados», además de un intercambio de prisioneros.
Pero sobre la cumbre ha planeado la ausencia de Rusia. Los 84 firmantes reconocieron como «necesaria» la inclusión de Moscú en futuras conversaciones de paz. Incluso el ministro ucraniano de Exteriores, Dimtro Kuleba, admitió que entiende «perfectamente» que será necesario dialogar con Moscú, pero Zelenski estimó que «Rusia no está preparada para una paz justa».
«No permitiremos que Rusia hable el lenguaje de los ultimátums, como lo hace ahora», afirmó Kuleba que dijo confiar en que el próximo evento de este tipo «sea por el fin de la guerra».
Pero ni siquiera se decidió cuándo ni dónde será la próxima reunión ni cómo continuará este proceso. Algunos países mencionaron que ambas partes tendrán que hacer concesiones, lo que en estos momentos tanto Kiev como Moscú rechazan. A la vez, Kuleba sostuvo que actualmente la paz de Ucrania depende de «fortalecer a nuestros soldados en el campo de batalla».