EEUU y sus aliados, alerta por las implicaciones de la alianza Putin-Kim
EEUU, Corea del Sur y Japón, preocupados por las implicaciones del nuevo tratado estratégico de Corea del Norte y Rusia, que acordaron ofrecerse asistencia militar en caso de agresión y allanaron el camino para más intercambios de defensa, analizan posibles respuestas. Moscú advierte a Seúl ante un posible envío de armas a Ucrania.
El presidente ruso, Vladimir Putin, realizó esta semana una gira para contrarrestar la apuesta de EEUU en la región de Asia-Pacífico que le llevó a Corea del Norte y Vietnam, donde suscribió importantes acuerdos. El principal, el firmado durante su histórica visita a Pyongyang, un acuerdo de asistencia mutua en caso de agresión, con el que Putin y el líder norcoreano, Kim Jong-un ,envían una advertencia a EEUU y a sus aliados asiáticos, y también redibujan las alianzas regionales bajo la atenta mirada de China.
EEUU, Corea del Sur y Japón pusieron el grito en el cielo. El ministro de Exteriores surcoreano, Cho Tae-yul, habló por teléfono con sus homólogos de EEUU y Japón, Antony Blinken y Yoko Kamikawa, respectivamente, en las que abordaron las implicaciones del nuevo pacto y analizaron posibles respuestas.
Según el documento suscrito el miércoles en Pyongyang, «si una de las partes es objeto de un ataque armado por parte de uno o varios Estados y se encuentra en estado de guerra, la otra parte le ofrecerá inmediatamente ayuda militar y de otro tipo con todos los medios a su alcance».
En el caso de Vietnam, aunque ha aplicado en los últimos años la «diplomacia del bambú», forjando lazos tanto con Occidente como con China y Rusia, su presidente, To Lam, anunció durante la visita de Putin que ambos países aumentarán su cooperación en defensa. En particular, la agencia rusa de cooperación técnico-militar contribuirá al fortalecimiento de la Armada vietnamita.
La tensión en la península coreana ha aumentado tras la visita de Putin a Pyongyang. En su conversación de ayer, Cho y Blinken coincidieron en que el fortalecimiento de la cooperación entre Rusia y Corea del Norte «plantea una amenaza significativa a la seguridad tanto de Corea del Sur como de EEUU» y «socava gravemente la paz y la estabilidad en la península de Corea y la región», detalló Seúl.
Cho pidió a Blinken trabajar estrechamente y tomar la iniciativa para dar la respuesta de la comunidad internacional, y le explicó las contramedidas ya fijadas por Seúl, que incluyen nueva sanciones a Pyongyang y controles de exportaciones a Moscú. Blinken respondió que «considerará varias formas de responder» a la amenaza, según Seúl.
Ambos cancilleres también acordaron fortalecer su disuasión ampliada y cooperar a nivel trilateral con Japón para hacer frente a los riesgos que entrañan los programas armamentísticos norcoreanos.
ENVÍO DE ARMAS A UCRANIA
Corea del Sur, que convocó al embajador de Rusia en el país, Georgi Zinoviev, para trasladarle su protesta por el acuerdo de cooperación estratégica, dijo estar valorando enviar armas a Ucrania como respuesta, lo que daría un giro a su política, que prohíbe el suminis- tro de armas letales a países que se encuentran en guerra.
El portavoz del Departamento de Estado de EEUU, Matthew Miller, agradeció a Seúl que reconsidere su postura, pero Putin le advirtió de que eso sería un grave error y de que Moscú podría adoptar medidas de respuesta. Sobre el suministro de armamento occidental a Kiev, subrayó que son acciones «cercanas» a un acto de agresión contra Rusia, y señaló que, aparentemente, «aquellos que suministran estas armas creen que no están en guerra» con Moscú.
Al término de su gira, Putin no descartó suministrar armamento a Pyongyang en respuesta a la entrega de armamento moderno a Ucrania por parte de los países de la OTAN.