Colonia
Un 26 de junio de hace 111 años nacía en Martinica Aimé Césarie, activista, político, poeta y ensayista que escribió que el colonialismo, «pérfido, testarudo y funesto», es una ideología basada en la cosificación de los indígenas, de su cultura y de su tierra. Sus reflexiones sobre la negritud supusieron un impulso a la toma de conciencia de pueblos como el kanako, invadido por el imperio francés en 1853 y que continúa colonizado por esa misma Francia que acaba de detener para su traslado a la metrópoli al soberanista Christian Tein como «presunto instigador de las revueltas». Escribió Aimé Césaire en 1955 que Hitler se limitó a «aplicar en Europa procedimientos coloniales que hasta entonces habían estado reservados exclusivamente a los árabes de Argelia, a los culís de la India y a los negros de África». La cosificación de los judíos no era, por tanto, nueva. Seguramente no lo sepa Serge Klasferd, escritor, historiador y abogado francés de origen rumano, conocido por su lucha contra el antisemitismo, que acaba de declarar que en caso de duelo en la segunda vuelta entre la izquierda y el RN, su voto irá al partido de Marine Le Pen, porque «hoy día apoya a los judíos y al Estado de Israel». No es de extrañar, porque su querido Israel es quien cosifica ahora a los habitantes de Palestina, otra colonia como lo es Nueva Caledonia.