GARA
BARCELONA
TRAS LAS ELECCIONES DEL 12 DE MAYO

La militancia de ERC secunda con un 53,5% el acuerdo para investir a Illa

Por 550 votos de diferencia y con una amplia participación -el 77%-, los afiliados y afiliadas de ERC refrendaron ayer el acuerdo alcanzado por la dirección con el PSC para investir a Salvador Illa como nuevo president de la Generalitat. La dirigente republicana Marta Rovira avisó de que es un aval «vigilante y exigente», mientras que los críticos de su partido demandan libertad de voto.

La secretaria general de ERC en funciones, Marta Rovira, durante una rueda de prensa para valorar los resultados de la consulta.
La secretaria general de ERC en funciones, Marta Rovira, durante una rueda de prensa para valorar los resultados de la consulta. (Kike RINCÓN | EUROPA PRESS)

La militancia de ERC avaló ayer, con un 53,5% de los sufragios emitidos en una consulta telemática, el acuerdo cerrado por la dirección del partido con el PSC para que los veinte representantes republicanos en el Parlament voten a Salvador Illa como president de la Generalitat. En concreto, de los 6.349 afiliados y afiliadas que participaron en la consulta, el 77% del censo, 3.397 votaron a favor; 2.847 (44,8%) lo hicieron en contra; y 105 per- sonas (1,7 %) se abstuvieron.

De esta forma, la militancia de ERC refrenda la posición de la actual dirección del partido, encabezada por Marta Rovira, que había defendido en los últimos días el preacuerdo alcanzado con el PSC, pero el resultado es tan ajustado que pone de manifiesto la brecha existente en la formación republicana por este motivo, que ha quedado de relieve en los últimos días, con distintos sectores posicionándose tanto a favor como en contra.

CONSULTA VINCULANTE

La pregunta a la que los y las militantes tuvieron que responder fue: “¿Estás de acuerdo con que ERC vote a favor de la investidura del candidato socialista a cambio de la soberanía fiscal, la promoción y protección de la lengua catalana, la Convención Nacional para la resolución del conflicto político y el resto de medidas acordadas?”. Esas medidas son las que contempla el citado acuerdo con el PSC, plasmado en un documento de 25 páginas.

La secretaria general con funciones de presidenta, Marta Rovira, siempre ha asegurado que resultado de la consulta era vinculante, de modo que tras el resultado prosperaría la posible investidura del líder del PSC porque sumaría los 68 votos que, como mínimo, requiere para asumir la Presidencia de la Generalitat.

Con todo, aún se mantiene un elemento de incertidumbre: Jovent Republicà, la organización juvenil vinculada a ERC, no ha garantizado a esta hora que su diputada, Mar Besses, vaya a apoyará la investidura pese a ganar el «sí», aunque Rovira, en rueda de prensa una vez conocidos los resultados, se mostró confiada de que sí que respaldará la investidura. La decisión la tomarán el lunes por la tarde.

UN SÍ «VIGILANTE Y EXIGENTE»

A falta de cerrar ese fleco, y al objeto de valorar es el escenario abierto tras la consulta de ayer, el PSC celebrará hoy mismo una reunión extraordinaria de la Comisión Ejecutiva en su sede de Barcelona, donde está previsto que a las once de la mañana intervenga el primer secretario del partido y candidato, Salvador Illa.

De todos modos, Rovira advirtió de que el «sí» que los republicanos darán a la investidura de Illa, tras el aval de las bases, es «vigilante y exigente» debido a la «desconfianza» que este partido independentista tiene hacia el PSC.

La dirigente republicana, que compareció arropada por numerosos militantes de ERC, dijo que la dirección ha recibido el mensaje de su militancia, que resumió de esta forma: el contenido del acuerdo es «muy bueno», pero «parece poco creíble» por la poca confianza que genera el PSC.

Preguntada sobre si ERC votará a Illa como president aun en el supuesto de que el expresident Carles Puigdemont, que ha prometido que volverá para la investidura, permanezca en prisión, la política independentista, que ha permanecido varios años exiliada en Suiza, respondió que la decisión todavía «no está tomada».

Asimismo, Rovira dijo que la decisión tomada ayer forma parte de «un proceso de reflexión» iniciado tras el batacazo del 12 de mayo y debe «culminar» en el congreso nacional extraordinario convocado para el 30 de noviembre.

Explicó que tras los comicios catalanes, y una vez asumido que tocaba pasar a la oposición, ERC ha encarado las negociaciones sin abandonar sus dos objetivos: avanzar hacia la independencia de Catalunya (la «financiación singular» sería un paso en ese camino) y una mayor justicia social. «La consulta ha sido un acierto y la conversación permanente que hemos tenido también. El ejercicio de democracia interna que ha hecho este partido es brutal y ejemplar», reivindicó al respecto.

LOS CRÍTICOS PIDEN LIBERTAD DE VOTO

Pero a nadie se le escapa lo controvertido que ha sido este asunto en el seno de ERC, y también ayer, casi al mismo tiempo que comparecía Rovira, el Col·lectiu Primer d'Octubre, crítico con la gestión de la Ejecutiva, pidió libertad de voto para los 20 diputados republicanos en la investidura del líder del PSC, que se celebrará en el Parlament, al constatar el ajustado margen entre los militantes favorables al preacuerdo y quienes lo rechazan. «El resultado ha sido favorable a la investidura del candidato del 155 por un ajustado margen. Un 45% de la militancia es contraria a la decisión planteada por la dirección del partido», valoraron en una nota.

Ante «esta evidente división de opiniones interna», los integrantes del Col·lectiu Primer de Octubre piden a los negociadores de ERC, encabezados por Rovira, interpretar correctamente la voluntad de la militancia y permitir a los 20 diputados de ERC que voten libremente de acuerdo con su conciencia, en sus palabras.

«Debemos luchar por reorientar la estrategia política del partido para que ponga en primer plano de nuestras reivindicaciones la liberación nacional de Cataluña», afirman, tras reclamar a los 3.397 militantes que han votado «sí» que «sean tanto o más exigentes que los del ‘no’ a la hora de pedir responsabilidades por los compromisos asumidos por la dirección».