20 AGO. 2024 Zelenski pide poder usar armas de largo alcance para frenar a Rusia Volodimir Zelenski pidió ayer a sus aliados occidentales que permitan que ataque a Rusia con armas de largo alcance para «detener el avance» del Ejército ruso en el este del país, donde sigue avanzando lentamente. Sus tropas, mientras, aumentan su control en Kursk. Mecánicos ucranianos se afanan en reparar un tanque en Donetsk. (AFP) GARA KIEV-MOSCÚ «Ucrania solo puede detener el avance del Ejército ruso en el frente con una decisión que esperamos de nuestros socios: la decisión sobre las capacidades de largo alcance», señaló ayer en Kiev el presidente ucraniano, Volodimir Zelenski, a sus embajadores al pedir a sus aliados occidentales permiso para utilizar ese armamento contra Rusia. Las tropas rusas, mientras, continuaron aumentando la presión sobre las fuerzas ucranianas en Donetsk, donde ya se encuentra a casi 10 kilómetros del nudo logístico de Pokrovsk, al tiempo que las ucranianas siguieron con su ofensiva en la región de Kursk expandiendo su zona de control. Moscú informó de que sus tropas en Donetsk lograron conquistar la localidad de Zalizne (Artiomovo para Rusia), a unos 40 kilómetros al norte de la capital regional y cerca de Bajmut, donde hace meses se registraron intensos enfrentamientos. Junto a la toma de Zalizne, el Ministerio ruso de Defensa señaló que sus tropas también han logrado «liberar» la estación de tren de Vyemka, también en Donetsk, mejorando así la «situación táctica» de los militares rusos en la zona. Estos avances se producen en un contexto marcado por la operación militar en la región fronteriza rusa de Kursk, iniciada hace 14 días, que ha permitido a Ucrania controlar, según Kiev, 1.250 km2 y 92 localidades. Moscú lo reduce a incursiones por carreteras, a modo de entradas y salidas. Las fuerzas ucranianas atacaron otro puente sobre el río Seym, el tercero en los últimos cuatro días, en la región de Kursk, que puede impedir la evacuación de civiles y la llegada de nuevas tropas rusas. EVACUACIÓN DE POKROVSK Las miradas ahora están en Kursk, pero mientras en Donbass sí parece más tangible el avance de Moscú. Una señal de ello fue que la propia Kiev ordenó la evacuación forzosa de las familias con menores de la ciudad de Pokrovsk. «Más de 53.000 personas, incluidos casi 4.000 menores, viven todavía aquí, pero el frente se sitúa demasiado cerca», indicó el gobernador de la administración militar de Donetsk, Vadim Filashkin. Rusia volvió a descartar cualquier negociación con Ucrania «en la fase actual» debido a la ofensiva en Kursk. El consejero de Zelenski, Mijailo Podoliak, dijo el viernes que con la incursión buscan «persuadir a Rusia de entrar en un proceso de negociaciones justas» y no ocupar permanentemente los territorios tomados. Pero ayer Yuri Ushakov, consejero diplomático de Vladimir Putin, afirmó que «dada esta aventura, no hablaremos. «De momento, entablar un proceso de negociación sería totalmente inapropiado», subrayó. LAVROVEl ministro de Exteriores de Rusia, Sergei Lavrov, afirmó ayer que Volodimir Zelenski «no se habría atrevido» a ordenar la incursión militar en la región de Kursk si antes no hubiese recibido el visto bueno de EEUU, una connivencia que niegan tanto Kiev como Washington.