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Suspenden provisionalmente la zona de bajas emisiones prevista en Lapurdi

Euskal Hirigune Elkargoa decidió ayer dejar provisionalmente en suspenso la aplicación de la zona de bajas emisiones entre Hendaia y Tarnos prevista para el 1 de junio y que afecta a más de una veintena de municipios de Lapurdi. La medida llega después de que esta semana voces de la Asamblea francesase alzaran contra el proyecto.

Euskal Hirigune Elkargoa reunió ayer al consejo comunitario en Baiona. (Patxi BELTZAIZ)

Euskal Hirigune Elkargoa anunció ayer la suspensión provisional del proyecto de zona de bajas emisiones (ZBE) entre Hendaia y Tarnos, que debía entrar en vigor dentro de dos meses, y que afecta a más de una veintena de localidades de Lapurdi. La decisión se adoptó ayer en el consejo comunitario reunido para debatir el sistema de apoyo a los automovilistas que se verán obligados a cambiar de vehículo con la implantación de la zona de restricciones en la costa. Sin embargo, al inicio de la sesión, el presidente, Jean-René Etchegaray, anunció la retirada de esta cuestión del orden del día.

La decisión de paralizar la iniciativa, cuya entrada en funcionamiento estaba previsto para este 1 de junio, tiene que ver con el debate abierto esta semana en una comisión en la Asamblea Nacional francesa, en la que varias formaciones denunciaron las repercusiones de la medida. Republicanos y Unión Nacional apostaron, por ejemplo, por no implantar las restricciones en el Estado.

Diputados participantes en el comité especial encargado de examinar el proyecto de ley de «simplificación de la vida económica» reclamaron la abolición de las ZBE en todo el Estado francés. El debate se retomará el 8 de abril, y el vicepresidente de Euskal Hirigune Elkargoa y responsable de movilidad sostenible, Jean-François Irigoyen, subrayó que es necesario esperar a que la Asamblea francesa se posicione. Según apuntó, solo las nuevas señales de tráfico específicas para la zona representan un coste de 850.000 euros para la comunidad.

Frente a las decisiones encaminadas a reducir la contaminación en núcleos urbanos, algunas fuerzas políticas alegan que con medidas como las zonas de bajas emisiones se penaliza a los hogares con menos ingresos.

Derecha y extrema derecha lideran en el Estado francés la oposición a la ZBE, aunque algunos diputados de izquierda también mostraron sus reservas, como Sandrine Nosbé, de Francia Insumisa. La formación se abstuvo en esta cuestión, en la que echa en falta «alternativas eficaces al coche individual».

LOS DATOS DE LYON Y PARÍS

El responsable de movilidad sostenible e innovadora matizó, no obstante, que el decreto que regula la implantación de zona de bajas emisiones en la costa vasca sigue estando en vigor, aunque ahora su aplicación esté temporalmente suspendida.

En medio de la controversia, el Ejecutivo francés mantiene su apoyo a que las diferentes regiones puedan adoptar estas medidas. La ministra de Transición Ecológica, Agnès Pannier-Runacher, dio a conocer datos que constatan la repercusión de la medida a nivel medioambiental, al detallar que en las dos ciudades donde la ZBE está implantada, Lyon y París, la concentración de dióxido de nitrógeno se ha reducido en más de un tercio.

Etchegaray precisó que la suspensión de la medida no pone en duda la creación de una ZBE el próximo 1 de junio, sino su aplicación de forma provisional.

La implantación de una zona de bajas emisiones se decidió en el seno de Euskal Hirigune Elkargoa el pasado febrero, con el compromiso de habilitar ayudas para los ciudadanos y concretar las exenciones para vehículos y determinadas profesiones.

Ya entonces la decisión tuvo su contestación en Ipar Euskal Herria, donde algunas voces consideran la aplicación de la ZBE una imposición de París, en torno a la que no se ha abierto un necesario debate. Las protestas ciudadanas llegaron ya entonces a puertas de la institución, donde grupos de vecinos denunciaron cómo afectan las restricciones a las familias con menos recursos económicos. Apelaron también a reducir las emisiones en otros transportes y espacios y no solo en lo que repecta a los automóviles.