Unicaja está en el momento ideal para meterle mano
Ibon Navarro advierte del poder reboteador de la escuadra malagueña, que incorpora a Germán Gabriel.
UNICAJA-LABORAL KUTXA
Si se atiende a los últimos resultados, Laboral Kutxa Baskonia ha entrado al fin en una trayectoria ascendente, un camino hacia la cumbre que deberá pasar la reválida de ganar fuera de casa. Si se atiende a los resultados de Unicaja, el líder de la Liga ACB Endesa no está dando pie con bola en la Euroliga, de modo que una de sus dos andaduras, la doméstica o la continental, no es del todo real. Los gasteiztarras tienen, pues, una ocasión clara para meterle mano al cuadro andaluz y ver si es la inercia ganadora la que empieza a cojear entre los de Joan Plaza.
Al fin y al cabo, toca mirar hacia delante y caminar por la buena senda en esta segunda vuelta, después de una primera turbulenta como pocas. Los últimos partidos en Zurbano han mostrado un Baskonia muy acertado, por momentos intenso en defensa y que, si consigue jugar a campo abierto, se encuentra muy cómodo. La cuestión será ver si logra imponer su ritmo o cae en el andaluz, algo que le valió para salir victorioso del Buesa Arena en la primera vuelta, un duelo en el que los de Plaza dominaron a placer y se impusieron por 79-88, pero después de disfrutar de ventajas de más de 20 puntos.
Segundas opciones
Unicaja es un equipo que también prefiere jugar a campo abierto, o más bien que también tiende a atascarse en los partidos cerrados, y más si no logra segundas opciones a través del rebote de ataque.
El aspecto del rebote es algo en el que tanto Ibon Navarro como Davis Bertans incidían en la previa. «Tienen jugadores grandes muy buenos y son un grupo defensivo muy bueno. Son el mejor equipo europeo en rebote ofensivo ahora mismo y creo que tenemos que controlar eso», afirmaba el letón, mientras que el técnico añadía que «rebote ofensivo les hace ser un equipo muy pegadizo, no te vas nunca de ellos».
De cara al partido de esta tarde, Joan Plaza podrá disponer de Germán Gabriel, recién aterizado de Bilbo. Su juego al poste bajo es una amenaza más para los gasteiztarras.