El documento presentado en el Parlamento de Edimburgo, ‘Tu Escocia, Tu Referéndum’ se centra precisamente en el proceso que determinará el contenido de la papeleta, que el Gobierno del Partido Nacionalista Escocés desea que sea abierto y accesible para todos los escoceses, porque está será «la decisión más importante tomada en Escocia en 300 años».
La decisión de los nacionalistas de iniciar una consulta popular de cara al referéndum, además de asegurar la participación ciudadana en temas claves para el futuro de Escocia, asegura que el debate sobre la independencia salga a la calle y empiece a discutirse desde un nivel práctico y real, en lugar de como una teoría distante, tal y como ha indicado Patrick Harvie, de los Verdes, al expresar su esperanza de que el debate de independencia abra la puerta al deseo de la gente «por tomar las riendas del futuro de su país y de nuestras comunidades».
«Nuestro futuro y elección»
Los unionistas escoceses pueden respirar tranquilos por el momento, como podrá hacerlo el primer ministro británico, ya que si la consulta no altera los planes de Salmond, la pregunta será clara y contundente -«¿Está de acuerdo con que Escocia sea una nación independiente?»-, con una respuesta de «si» o «no».
Salmond parece haber abandonado los planes para la creación de una comisión independiente para hacerse cargo de la votación, y ha aceptado que sea la Comisión Electoral la responsable por la organización de la votación (que costará 10 millones de libras esterlinas) y el recuento de los votos. Sin embargo, los resultados de la consulta pública a la que se invita a los escoceses, serán los que determinen, además de la pregunta a incluir en la papeleta, los límites de gastos en la campaña electoral, y cómo debe regularse el referéndum.
Durante la presentación del documento, Salmond ha cuestionado a aquellos que plantean que Escocia no está preparada para ser independiente, recordando que cuentan con importante recursos naturales, «gente brillante y una sociedad fuerte» y que necesita de la independencia para poder desarrollarse totalmente, con una visión que aúna la riqueza económica de Escocia con el bienestar de los ciudadanos para «crear una nación mejor» fuera de las limitaciones presupuestarias impuestas desde Londres, que obstaculizan la creación de empleo, el crecimiento económico y la existencia de estructura de apoyo para aupar a aquellos que más lo necesitan. Es por ello que Salmond aboga por abandonar una constitucionalidad que les limita, para conseguir una «que nos libere para construir una sociedad mejor».
‘Tu Escocia, Tu Referéndum’ es un documento de 122 páginas que invita a los escoceses a decidir cómo se organizará el referéndum, y todas las respuestas y sugerencias recibidas serán publicadas siempre y cuando los participantes no exijan mantener el anonimato, y formarán parte del debate parlamentario, que los nacionalistas planean para 2013, para el desarrollo de la legislación de referéndum.
Durante su intervención en el Parlamento, Salmond señaló todos los residentes en Escocia tienen derecho a participar en el referéndum, y que el deseo de su partido es que este derecho se extienda a los jóvenes de 16 y 17 años.
En el capitulo 4 el documento presenta cuáles serían los pasos a seguir en el caso de que los votantes optaran por la independencia de Escocia, entre ellos un periodo transitorio para asegurarse de que las instituciones estatales están preparadas para responder a sus nuevas responsabilidades. Laboristas, Liberales y conservadores permanecen unidos en su oposición al plan de Salmond.