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DAMASCO

Annan viaja a Rusia para intentar salvar la misión de la ONU en Siria

El mediador internacional en Siria, Kofi Annan, ha llegado hoy a Moscú para intentar salvar con el apoyo de los dirigentes rusos la misión de la ONU en el país árabe, que expira el día 20.

El mediador internacional en Siria, Kofi Annan, con el ministro de Exteriores ruso, Serguéi Lavrov, en su visita a Moscú. (STR/AFP)
El mediador internacional en Siria, Kofi Annan, con el ministro de Exteriores ruso, Serguéi Lavrov, en su visita a Moscú. (STR/AFP)

El mediador internacional en Siria, Kofi Annan, ha viajado a Rusia para abordar el cumplimiento del plan de paz diseñado para Siria y, de ese modo, intentar salvar con los dirigentes rusos la misión de la ONU en el país árabe, que expira el día 20.

Hoy se ha reunido con el ministro de Exteriores ruso, Serguéi Lavrov, y mañana lo hará también en el Kremlin con el presidente ruso, Vladímir Putin. «Buscamos la prolongación del mandato de la misión de la ONU y su posible modificación para darle un mayor énfasis político», ha afirmado Lavrov en rueda de prensa.

Annan intentará, por su parte, buscar apoyos ante una nueva escalada de la violencia y el creciente escepticismo de la oposición siria, los países de la región y de occidente.

Estados Unidos, los países europeos y Turquía son partidarios a dar un ultimátum a Damasco para que cumpla con los siete puntos del plan de Annan, en particular la retirada del armamento pesado de las ciudades, o se atenga a las consecuencias.

Rusia, por su parte, ha propuesto en el Consejo de Seguridad de la ONU un proyecto de resolución para prolongar por otros tres meses la presencia de los observadores de Naciones Unidas en el país árabe.

Rusia ha respaldado desde el inicio el plan de Annan al considerar que su cumplimiento por parte del régimen y los rebeldes es la mejor forma de evitar una guerra civil. De hecho, Lavrov ha asegurado que no solo quieren que la ONU se limite a observar, sino que quieren participar «activamente» en las labores de mediación para lograr el fin de los combates.

El ministro de Exteriores ruso ha acusado a Occidente de utilizar la misión de la ONU como «monedas de cambio» al vincular su presencia en Siria con el cumplimiento del plan de paz por el régimen de Asad.

Lavrov ha señalado a algunos países de estar interesados en provocar una guerra civil por su actitud de dar la espalda al acuerdo alcanzado en Ginebra, relativo a la creación de un Gobierno de transición integrado por miembros del actual régimen y la oposición.

Según la prensa internacional, Annan tiene la intención de pedir a Putin que presione a Asad para que cumpla los seis puntos del plan de paz y ponga fin a las hostilidades.