«No hay cambio político y social posible en Navarra si no se adopta un compromiso firme por parte de todas las fuerzas políticas para investigar y erradicar de raíz la corrupción política y económica». Es lo que han manifestado Maitane Intxaurraga y Txelui Moreno, en nombre de la izquierda abertzale, en relación a los escándalos de la Caja de Ahorros de Navarra.
Tras hacer un repaso de las últimas décadas, recordando la implicación de diferentes presidente del Gobierno foral en casos de corrupción, los independentistas llegan a conclusión de que «la corrupción se ha convertido en una de las señas de identidad del marco político vigente en Navarra».
Así, para la izquieda abertzale, «el caso de Asiáin-Cervera puede ser todo menos un caso aislado». Por lo menos, se debe investigar, «hasta sus últimas consecuencias, lo ocurrido desde el nombramiento, en 2002, de Enrique Goñi por parte del entonces presidente Miguel Sanz.
Intxaurraga y Moreno han mostrado su convencimiento de que «los problemas de las cajas de ahorro vienen de atrás, desde la aprobación sin refrendo popular de ese artículo 56 del Amejoramiento del Fuero que otorga a las cajas navarras un régimen especial de convenios que permite que el funcionamiento orgánico de las mismas sea absolutamente opaco al control democrático».
Tras lanzar la pregunta de quiénes y por qué han tomado las decisión que han llevado a semejante situación, la izquierda abertzale ha manifestado que en el diseño de toda esta operación política y económica han participado de forma directa personas estrechamente vinculadas a los aparatos del Estado.
«Personas como el abogado madrileño Alonso Ureba o Ricardo Martí Fluxá han ejercido de asesores y por lo tanto son responsables de llevar a la CAN hasta las puertas de su extinción», ha denunciado, para explicar que «la conclusión clara y contundente» que se extrae de la información disponible es que «quienes han tomado las decisiones en la CAN lo han hecho para sacar a la Caja de su camino natural de encuentro con el resto de las cajas de ahorros públicas vascas».
A su entender, el «rocambolesco» suceso de la detención de Cervera y los posteriores episodios «no son sino un doble intento del Estado y de las familias que ostentan el poder político y económico para, por un lado, echar tierra y cal sobre esta larga historia de despilfarro y corrupción, y para, por otro, generar movimientos de fondo con el objetivo de dificultar el cambio político y perpetuarse en el poder desde el que han gestionado la economía navarra como si de un cortijo se tratara».
Para denunciar esta situación, la izquierda abertzale ha convocado concentraciones para el día 21 frente a la sede central de la CAN en Carlos III, y para el 29, a las 12.00, en frente de sus oficinas en las localidades de Iruñea, Irurtzun, Uharte Arakil, Lakuntza, Arbizu, Etxarri, Urdiain, Altsasu, Olazti, Larrainzar, Tafalla, Lizarra, Bera, Leitza, Elizondo, Burlata, Antsoain, Zizur, Agoitz y Tutera.