El ministro de Asuntos Exteriores español, José Manuel García-Margallo, ha asegurado que el Gobierno de Rajoy no permitirá «nunca» una consulta que no se ajuste a la legalidad y ha señalado que la declaración aprobada por el Parlament es «retórica y sin efectos jurídicos».

García-Margallo ha hecho estas declaraciones después de reunirse con su homólogo alemán, Guido Westerwelle, al referirse a la aprobación por parte del Parlament de la Declaración de Soberanía.

Sobre posibles acciones del Gobierno para frenar esta declaración, el ministro ha señalado que ésta no tiene efectos jurídicos, por lo que un recurso ante el TC le parece «dificil» al ser un texto retórico.

A su juicio, la declaración tiene una primera parte que demuestra «exactamente lo contrario de lo que pretende», ya que, según el ministro, «evidencia que Cataluña forma parte de España desde hace más de quinientos años».

García-Margallo ha sostenido que las conclusiones «son erróneas» y que el apartado que señala que el pueblo catalán tiene carácter de sujeto político y jurídico soberano «es contrario al artículo 1 de la Constitución».

Además, ha comentado que la declaración apela «a la legitimidad democrática, ya que esta reside en el pueblo español».

Según el ministro, cualquier decisión de «secesión» sería «una declaración unilateral de independencia» que, a su juicio, «no sería aprobada por la inmensa mayoría de los países de la UE».