En un nota de prensa, la red ciudadana para el acuerdo y la consulta, Lokarri, ha valorado el último comunicado de ETA, publicado este martes por NAIZ.

En su comunicado, la organización armada afirmaba que el cierre del espacio de negociación de Oslo «atrasa y dificulta la resolución». A pesar de ello, reitera que «seguirá trabajando por construir una resolución definitiva y mantendrá activa la representación que ha designado. No cederemos ante la dificultades, por que Euskal Herria merece y necesita la paz y la libertad».

Lokarri constata que, «desde hace meses», ha quedado delimitado dónde se encuentra el «nudo gordiano» para la consolidación del proceso de paz. «ETA, –explica Lokarri– para avanzar pide a los gobiernos el inicio de contactos. mientras, los gobiernos niegan cualquier posiblidad de contacto con ETA y exigen su disolución como condición para cambiar la política carcelaria».

La red ciudadana recuerda que el ministro de Interior, Jorge Fernández Díaz, declaró el pasado 31 de octubre que la organización armada «estaría dispuesta a resolverse, a desmantelar sus estructuras y a entregar las armas a cambio de un acuerdo sobre los presos». También ETA, en el comunicado publicado en el mes de noviembre, manifestó su disposición a abordar su desarme y desmantelamiento.

Estos hechos, según Lokarri, merecían una «respuesta rápida y constructiva» del Gobierno español. Así lo aconseja la ONU, cuando afirma que el desarme, el desmantelamiento y la reintegración son vitales para la consolidación de la paz. Madrid, en cambio, «se niega rotundamente» a abordar el tema.

Lokarri resalta que «ETA debe ser consciente de que el protagonismo en el proceso de paz corresponde a la ciudadanía vasca», y recuerda que así lo reconoció la propia organización en noviembre.

«Por tanto, sería conveniente que, al analizar la situación y estudiar cómo puede aportar al proceso de paz, tuviera en cuenta los deseos y anhelos de la sociedad, por encima de lo que haga o deje de hacer el Gobierno», apunta Lokarri, que añade que la ciudadanía «ha manifestado su deseo de que ETA proceda al decomiso de sus armas y a su desmantelamiento como organización armada».

Además, la red le recomienda «avanzar» en esos ámbitos para «eliminar» la «sensación de amenaza latente» que pudiera existir en ciertos sectores.

A modo de conclusión, y ante la «falta de avances en el ámbito de diseño e implementación de una agenda de desarme, desmantelamiento, y desintegración, dado que el Gobierno se niega a mantener contactos y ETA no contempla otra posiblidad que no pase por un diálogo con el Gobierno», Lokarri considera que es momento de comenzar a «pensar creativamente en otras posibles soluciones».

En ese sentido, considera «conveniente» desarrollar un «trabajo constructivo, con participación institucional, política y social, que tenga como objetivo proponer soluciones efectivas para lograr avances en dicho proceso de desarme, desmantelamiento y reintegración».