La conmemoración este año del bicentenario de la quema de Donostia alcanza este fin de semana su punto álgido con los conciertos del Orfeón Donostiarra y la Orquesta Sinfónica de Euskadi, desfiles de tamborradas y recreaciones históricas.
El objetivo es reconocer el esfuerzo colectivo que los donostiarras realizaron hace 200 años para reconstruir una ciudad asolada tras la entrada de las tropas aliadas angloportuguesas.
La conmemoración de este 200 aniversario arrancó el viernes con el concierto que ofreció en la Basílica de Santa María el Orfeón Donostiarra, que estrenará una obra compuesta especialmente para esta efeméride: el himno del bicentenario ‘Suak pizturik dirau’ de Tomás Aragües (música) y Beñat Gaztelumendi (letra).
Tras el espectáculo conjunto que las compañías de danza Kresala y Verdini representaron frente a la escultura de Jorge Oteiza, en el Paseo Nuevo, la Orquesta Sinfónica de Euskadi cerró la noche del viernes con un concierto al aire libre, en plena plaza de La Constitución, en el que recibirá además la Medalla de Oro de la ciudad de manos de su alcalde, Juan Karlos Izagirre, en un acto al que asistirá el lehendakari, Iñigo Urkullu.
Los actos de este sábado han comenzado con el repique de campañas, que simbolizará el aviso de peligro que vivieron los donostiarras en esa fatídica jornada, tras lo cual se celebrará una misa-funeral en la Basílica de Santa María en memoria de las víctimas, mientras que los sonidos de txistus, cañones y tambores se adueñarán de la ciudad.
Los jardines de Alderdi Eder albergarán, a partir del mediodía, una concentración de tamborradas en la que tomarán más de cuarenta compañías.
Las recreaciones históricas serán después las grandes protagonistas con el desfile conmemorativo que partirá desde la plaza de Zuloaga y recorrerá toda la Parte Vieja al son de tambores y barriles.
La Quincena Musical también mirará al bicentenario desde el Palacio Kursaal con la Orquesta Sinfónica de Galicia y el Orfeón Donostiarra.
Un año más, la calle 31 de agosto, la única de la actual Parte Vieja que quedó en pié tras el incendio, acogerá, por la noche, el tradicional apagado de velas, mientras que en el pórtico de San Vicente se interpretará el antiguo himno de la capital guipuzcoana y saldrá la comitiva, a la luz de las antorchas, interpretando la "Marcha del 31 de agosto", junto al Orfeoi Txiki.
Los actos concluirán con una representación teatral en la Plaza de La Constitución a cargo de Donostia Sutan.