La Corporación subraya que en los últimos años ha destinado a Fagor Electrodomésticos «en concepto de apoyo solidario intercooperativo un total de 300 millones de euros», sin que ello haya servido para salvar la situación de la empresa, en preconcurso de acreedores desde el 16 de octubre al no haber podido hacer frente a su abultada deuda.
La caída de Fagor, puntualiza, «no afecta a las demás cooperativas de la Corporación, ya que no se trata de un holding empresarial, sino de asociación de entidades independientes y autónomas».
Sobre la destrucción de empleo que supone el cierre de Fagor –unos 4.000 empleos directos e indirectos en Euskal Herria–, la Corporación apunta que continuará habilitando todos los mecanismos de solidaridad necesarios para reducir al máximo el impacto. Desde recolocaciones, pasando por prejubilaciones y poniendo en marcha programas de formación que faciliten la empleabilidad de los socios».
Todas estas acciones se coordinarán, ya se está haciendo, desde la Oficina Corporativa de Empleo, en la que participan el departamento de personal de Fagor Electrodomésticos, Lagun-Aro, EPSV, y el departamento de Gestión Social de la Corporación.
«La diversidad de sectores y mercados en los que nuestras cooperativas tienen presencia es una garantía que nos hace pensar que en el futuro a corto medio plazo seguirán generando nuevas actividades y consiguientemente nuevas oportunidades de empleo. El hecho de que nuestros negocios sean competitivos en sus respectivos mercados es una buena noticia para dar una solución al empleo excedentario de Fagor Electrodomésticos», añade el comunicado.
El texto finaliza con la ratificación de la apuesta por el modelo cooperativista «con una trayectoria empresarial de éxito y probada eficiencia en diversos sectores».
Manifestación
Horas antes de este anuncio, los trabajadores de Fagor ya habían convocado una manifestación para este viernes en Arrasate (18.00), que partirá desde la planta del barrio de San Andrés y finalizará en la plaza del pueblo.
Tanto el Consejo Rector como el Consejo Social de la cooperativa alertaban antes del anuncio de la Corporación de su «inminente» desaparición en caso de no lograr financiación para su plan de viabilidad.