Felipe de Borbón no se encontrará con los brazos abiertos en la primera visita que hoy realiza como monarca a tierras catalanas, donde hoy entregará los premios de la Fundación Príncipe de Girona. Antes de eso, el pleno del Parlament ha aprobado esta mañana una moción de ICV-EUiA en la que se rechaza la forma en la que se ha aprobado la ley de abdicación y en la que se reclama un referéndum entre monarquía y república.
«Como consecuencia de la abdicación se debería haber convocado un referéndum sobre la posibilidad de la restitución de la República o la continuidad de la monarquía, dado que las circunstancias políticas que se produjeron en el momento de la promulgación de la Constitución española de 1978 estaban totalmente condicionadas por la necesidad de superar la dictadura franquista», se lee en la moción aprobada.
El texto ha contado con 33 votos a favor, correspondientes a los diputados de ERC, ICV-EUiA y CUP. CiU, PSC y Ciutadans se han abstenido, mientras que el PP se ha quedado solo en la oposición.
La moción del Parlament no será la única señal de rechazo que se encuentre hoy Felipe de Borbón -que coincidirá con Mas en la cena oficial, aunque no hay previsto ningún encuentro formal-. De hecho, el recién estrenado monarca, que hasta ahora ostentaba el título de Príncipe de Girona -que ahora pasa, en teoría, a su hija- aterrizará en una ciudad que la semana pasada acordó, en el pleno del Ayuntamiento, que el título de Príncipe de Girona «no representa a la ciudad», al considerar que no existe el consenso político que se dio en 1981. De hecho, 23 de los 25 concejales apoyaron la moción municipal.
En Girona, Felipe de Borbón se encontrará además con la primera manifestación en contra de su reinado, después de la censura y la represión a las protestas organizadas en Madrid el día de la coronación.