Durante el juicio que se está llevando a cabo en París contra siete ciudadanos vascos, Ibon Goieaskoetxea ha leído un comunicado, en nombre de todos, enumerando tres «reivindicaciones inmediatas» que se resumen en «la aplicación de la legislación».

Goieaskoetxea ha advertido de que el Estado francés pretende «deshacerse» de ellos entregándolos al Estado español, que mediante su política de dispersión les mantendrá «alejados de Euskal Herria». Ello viene al hilo de la normativa europea que prevé el reconocimiento de decisiones penales en otros estados.

De este modo, la declaración leída durante el juicio reclama el fin de la dispersión aplicada tanto en uno como en otro estado, la liberación de los presos enfermos y la de aquellos que han cumplido más de veinte años en prisión.

El juicio a estas siete personas acusadas de pertenecer al «aparato logístico de ETA» comenzó hace tres semanas en la capital francesa.