Ino Galparsoro y Mikel Etxaburu han ejercido de portavoces de los encausados durante la concentración que han celebrado esta tarde en Zuatzu minutos antes de partir en furgonetas hacia Madrid, donde el lunes arranca el juicio en la sede de la Audiencia Nacional de la localidad madrileña de San Fernando de Henares.
Los 35 procesados por integración en ETA se enfrentan a peticiones fiscales de 10 años de cárcel.
Galparsoro ha asegurado que serán juzgados por el «trabajo político» que realizaron entre 2005 y 2008.
«Nuestro trabajo fue político y desde ese punto de vista estamos de alguna manera satisfechos por nuestro intento de conseguir el escenario de paz y libertad que queríamos para Euskal Herria», ha recalcado.
Ha asegurado que, «de alguna manera, algún paso adelante se ha conseguido dar» y ha opinado que el trabajo desarrollado por los imputados «también ha tenido que ver en ese sentido».
Ha querido agradecer «las muestras de solidaridad recibidas» que, según ha dicho, se convertirán en el «mejor compañero» para afrontar un juicio que, en su opinión, pretende «poner un obstáculo en el futuro de este país»
«Estamos convencidos de que no lograrán paralizar el futuro que Euskal Herria tiene y se merece», ha subrayado Galparsoro.
Ha anunciado también que el próximo sábado tendrá lugar en Donostia un acto en el Museo de la Ciencia Eureka en el que participarán imputados en distintos sumarios para manifestar su «voluntad de seguir adelante y de trabajar por el futuro del país».