El ex presidente de Kutxabank, Mario Fernández, y el ex delegado del Gobierno español en la CAV, Mikel Cabieces, han acudido a la Fiscalía de Bizkaia tras la denuncia del banco por presuntos pagos irregulares durante la presidencia de Fernández en la entidad. A su llegada a la Fiscalía, Fernández ha asegurado estar «tranquilo aunque absolutamente indignado».

Asimismo, ha afirmado sentirse «extraño» en el juzgado, porque no está «acostumbrado».

Cabieces, por su parte, se ha negado a hacer declaraciones a la prensa alegando que «es tiempo judicial».

Estas comparecencias se producen después de que este miércoles declarara ante el Ministerio fiscal el director de Recursos Humanos de Kutxabank, Fernando López de Eguilaz, que fue la primera persona en comparecer, después de que se abrieran diligencias de investigación para comprobar si ha habido irregularidades en Kutxabank. Unas irregularidades que habrían supuesto un coste de 243.592,02 euros durante la gestión de Mario Fernández al frente del banco.

Kutxabank denunció ante la Fiscalía las presuntas anomalías detectadas en el mandato de Fernández, cuyo importe fue devuelto, y que se refieren, al contrato de prestación de servicios jurídicos que la entidad mantenía con un bufete de abogados de Bilbo, con el que Mikel Cabieces, que se dijo de baja del PSE tras conocerse esta información, tiene una relación profesional.

La entidad comunicó estos hechos al Banco de España que, a su vez, lo trasladó al Banco Central Europeo, que citó al actual presidente de Kutxabank, Gregorio Villalabeitia, para conocer los detalles del caso.