El alcalde de Gasteiz, Javier Maroto, ha recibido por parte del secretario de Paz y Convivencia, Jonan Fernández, un informe sobre las muertes ocasionadas en la capital alavesa por ETA, otros grupos armados o las Fuerzas de Seguridad del Estado entre 1960 y 2010.
En el caso de gasteiz, el trabajo cuantifica en 31 las víctimas mortales ocasionadas por ETA o otros grupos armados, en cuanto que son diez las ocasionadas pos las FSE, entre las que se incluyen las cinco que mueron muertos a manos de la Policía española el 3 de marzo de 1976.
Al respecto, Maroto ha criticado que el informe es un «batiburrillo» al mezclar «churras con merinas». A su juicio, las víctimas de ETA «no son como las demás», por lo que «no las podemos situar en el mismo plano» que a otros damnificados por el conflicto vasco.
El alcalde ha reivindicado la «singularidad» de las víctimas de ETA. Además, ha rechazado que se trate de establecer una «equidistancia» entre difenretes víctimas «con el objetivo de alimentar la tesis de que en Euskadi ha existido una guerra entre dos bandos».