Mikel Cabieces no fue solo un «empleado indirecto» de Kutxabank entre febrero de 2012 y noviembre de 2014, sino que durante ese tiempo también fue miembro de los órganos de gobierno de la BBK, primero en su consejo de administración y después en el Patronato de la Fundación.
Según la Ley 11/2012, de 14 de junio, de Cajas de Ahorros de la Comunidad Autónoma de Euskadi, «las personas que estén ligadas a la caja de ahorros (...), por contratos de obras, servicios, suministros o trabajos retribuidos» son incompatibles para el cargo de miembro del Consejo de Administración. De hecho, ni siquiera pueden ser consejeros o consejeras de la Asamblea General.
Según reconoció por escrito el pasado viernes el expresidente de Kutxabank y de la propia BBK, Mario Fernández, la entidad le encontró un trabajo a Mikel Cabieces en un despacho de abogados con el que mantenían una relación de servicios y trabajos retribuidos, tan estable que el pago se realizaba a través de una iguala (cantidad fija por un periodo de tiempo) y no por la facturación de cada uno de los trabajos.
En la medida en la que la contratación de Mikel Cabieces supuso un incremento de esa iguala en unos 6.000 euros mensuales, parece evidente que Cabieces cobraba su salario gracias a ese contrato con Kutxabank, lo que hace pensar que podía incurrir en la incompatibilidad señalada por la ley para ser miembro del Consejo de Administración.
Comisión de retribuciones
Era a la Comisión de Retribuciones y Nombramientos a la que le correspondía «garantizar el cumplimiento de los requisitos legalmente previstos en la Ley para el ejercicio del cargo de miembro del Consejo de Administración».
La Comisión de Retribuciones y Nombramientos estaba presidida por Ainhoa Pieló, elegida en su momento en la candidatura a la asamblea presentada por el PNV, al igual que Roberto Zarate, que ejercía de vocal. También era vocal Francisco José Berjón, del PSE. Como secretario de la comisión aparece Joseba Gotzon Bilbao.
Por lo que se observa, a la hora de garantizar el cumplimiento de los requisitos legales ninguno de los cuatro vio relación alguna entre la actividad laboral declarada por Mikel Cabieces y una posible incompatibilidad para ser miembro del Consejo de Administración.
Es preciso tener en cuenta que otra de las funciones de la Comisión de Retribuciones y Nombramientos es la de «examinar la información remitida por parte de los consejeros acerca de sus restantes obligaciones profesionales, así como, en su caso, las situaciones de conflicto, directo o indirecto, que los miembros de los Órganos de Gobierno de la Caja pudieran tener con los intereses de la misma». Para ello, los miembros del Consejo de Administración tendrían que haber comunicado a la Comisión sus actividades, y ésta, valorar si interferían en la dedicación que se les pedía.
O Mikel Cabieces no comunicó a la Comisión de Retribuciones y Nombramientos cuáles eran sus «obligaciones profesionales» en un despacho de abogados que trabajaba directamente para la BBK o los integrantes de la misma no entendieron que pudiera haber colisión alguna de intereses, porque en el «Informe anual sobre remuneraciones de los miembros del Consejo de Administración» no figura nada al respecto. La ocultación de este tipo de datos está contemplada como infracción en la Ley de Cajas.
Dietas
La asistencia a las reuniones del Consejo de Administración de la BBK se retribuían con una dieta fija de 300 euros brutos, que suponen 195 euros netos. Mikel Cabieces cobró 600 euros en 2012 y 2.100 euros en 2013. El informe anual de 2014 no está todavía aprobado y publicado, pero cabe calcular que la percepción de dietas rondaría los 1.200 euros.
Con la transformación de la BBK en fundación, en junio de 2013, Mikel Cabieces pasó de ser miembro del Consejo de Administración a integrar el Patronato, pero no llegó a tomar parte en la constitución del mismo, que tuvo lugar a finales de noviembre, al haber sido elegido como secretario de Reformas Institucionales de la Comisión Ejecutiva del PSE.
La ley de las fundaciones bancarias estipula que no puede haber cargos políticos en las mismas. Pese a la claridad de la norma, Mikel Cabieces trató entonces de presentar su renuncia como una decisión personal, alegando públicamente que él no cobra por su labor en la Ejecutiva del PSE y tampoco desarrolla tareas de primer nivel, pero que para evitar posibles incompatibilidades decidió renunciar a formar parte del Patronato.
Fuera de la dirección del PSE
Cuando trascendió que Kutxabank había puesto en manos de la Fiscalía la actuación de su expresidente, Mario Fernández, y se relacionó con la actividad laboral de Mikel Cabieces en un despacho de abogados, la secretaria general del PSE, Idoia Mendia, se reunió con él.
Según la nota publicada por el PSE el 30 de enero, «sin prejuzgar responsabilidades», tanto Idoia Mendia como el propio Mikel Cabieces acordaron la renuncia de éste a su cargo de secretario de Reformas Institucionales de la Comisión Ejecutiva. Además, Cabieces pidió su «baja temporal» como militante del PSE «para que nadie pueda utilizar este asunto en contra de la organización».
El pasado viernes, Mikel Cabieces declaró ante la Fiscalía de Bizkaia por esta causa. Ni a la entrada ni a la salida de los juzgados dio explicaciones ante los periodistas que allí estaban. Afirmó que ahora estamos «en tiempo judicial».
El PP intenta sacudirse de encima el caso atacando a Mario Fernández
La presidenta del PP vasco, Arantza Quiroga, afirmó ayer que es una «burla» que PNV y PSE intenten responsabilizar a su partido de lo ocurrido en Kutxabank. Reclamó al expresidente del banco, Mario Fernández, que acusó a un líder del PP de pedirle que pagara a Cabieces, que dé explicaciones, y señaló que «la responsabilidad», en todo caso, es suya por tomar la decisión de pagar al exdelegado del Gobierno.
Quiroga afirmó, en un acto en Trapagaran, que de existir leyes «no escritas», como a la que hizo referencia el expresidente de Kutxabank Mario Fernández, ella «podría tener en el despacho largas colas de personas que han dado mucho contra el terrorismo», y no han recibido el trato de Mikel Cabieces, «ni se le han pagado 6.000 euros al mes».
Pero más duro aún que Quiroga fue su vicesecretario en el partido y diputado general de Araba, Javier De Andrés, que calificó de «cobardes» las explicaciones públicas que ha dado Mario Fernández y anunció que su partido apoyará la creación de una comisión de investigación en la Cámara autonómica.
De Andrés aseguró que no le consta que Antonio Basagoiti intercediera por Mikel Cabieces ante Mario Fernández y afirmó que lo adecuado hubiera sido que el expresidente de Kutxabank diese «el nombre de su jefe en el PP, si es que cree que lo tiene». «Curiosamente, una persona como Mario Fernández, que siempre se ha jactado de no tener jefes, ahora resulta que el jefe estaba en el PP y nosotros no lo sabíamos», ironizó.
El diputado general de Araba afirmó que las responsabilidades judiciales las tendrá que dirimir quien corresponda, pero tachó de «injustas», «paupérrimas» y «cobardísimas» las explicaciones públicas de Mario Fernández. GARA
EH Bildu subraya la necesidad de control público y de una investigación
La dirigente de EH Bildu Ainhoa Beola subrayó ayer que los pagos irregulares de Kutxabank al exdelegado del Gobierno español Mikel Cabieces muestran «claramente» la necesidad de que se establezca un «control público» de la gestión de esta entidad, como viene reclamando reiteradamente la coalición. Además, insistió en la necesidad de crear una comisión de investigación en el Parlamento de Gasteiz para aclarar todo lo ocurrido en esta extraña operación. Mostró su deseo de que sea «apoyada y aprobada por todo el arco parlamentario». El PP, a través de de Andrés, se mostró ayer partidario de una investigación parlamentaria.
Ainhoa Beola participó ayer lunes en una protesta ante la sede Kutxabank en Donostia, junto a exmiembros del Consejo de Administración de la Kutxa.
En declaraciones a los periodistas, señalo que en caso de haber existido ese control públic, ahora contarían con información «mucho más directa de este tipo de irregularidades», una situación de la que hizo responsables a PNV, PSE y PP por votar en contra de las auditorías externas.
Según Ainhoa Beola, «este caso abre la puerta a tener dudas sobre todo el dinero de miles y miles de personas que está siendo utilizado de forma poco ética e inadecuada», dado que se destina a «responder y financiar los intereses personales y políticos de PNV, PSE y PP».
La dirigente de EH Bildu criticó además que estas irregularidades se hayan producido «en momentos en que dicen que no hay financiación para la obra social. Hemos visto que han estado acordando entre ellos `te doy este dinero' a cambio de no sabemos muy bien qué, pero esto está ocurriendo con mayor fuerza si cabe desde que se está dando un proceso privatizador».
Por otra parte, en Araba EH Bildu reclamó del diputado general, Javier De Andrés, explicaciones sobre si conocía, a través de la representación de Vital Kutxa, la «cadena de favores» en favor de Mikel Cabieces. GARA