«Navarra está a las puertas del cambio», ha vaticinado Sabino Cuadra, diputado de Amaiur, en el Congreso español mientras interrogaba al ministro de Sanidad, Alfonso Alonso, sobre los 15 recursos interpuestos por Madrid a otras tantas leyes navarras, la última, la que regula el uso del cannabis en el herrialde. El parlamentario abertzale ha recordado que las normas recurridas tenían que ver con cuestiones tan sensibles como paralizar los desahucios, garantizar la paga extra a los funcionarios recortada por el PP o permitir el acceso al servicio sanitario a todos los habitantes de la comunidad foral. «Es un rércord en todo el Estado», ha denunciado, tras acusar al Gobierno que dirige Mariano Rajoy de «mentir más que hablar» y presumir de que «Nafarroa es la panacea» mientras pierde competencias.

«Anulan leyes que no son de su gusto político a través de un TC hecho a su imagen y semejaza», ha argumentado. Ante la posibilidad de que UPN, aliado del PP y firmante de 9 de los 15 recursos, sea desalojado del poder, Cuadra ha considerado que Madrid «responde de forma marrullera». Ha denunciado las multas administrativas (Nafarroa es la comunidad que más sanciones ha recibido, tal y como señaló ayer el senador Alberto Unamunzaga) y ha reivindicado el derecho a decidir de los navarros. «Saquen sus manos de Navarra, déjenos en paz», ha cerrado.

Alonso, por su parte, se ha enrocado en el malabarismo dialéctico. Por una parte ha defendido que se interpongan los recursos pero, por la otra, se ha erigido como defensor de los Fueros. «El Gobierno respeta la acción legislativa de las comunidades. Como somos tan escrupulosos, si es contraria a la Constitución la recurrimos al Tribunal Constitucional», se ha justificado. Pese a ello, ha insistido en definirse como garante de las instituciones navarras. «Respeten ustedes a Navarra», le ha llegado a decir a Cuadra, para lanzar un mensaje sobre la «disolución» del herrialde en Euskal Herria.