Neoliberal uno, anticapitalista el otro. De camisa uno y de camiseta, por supuesto, el otro. El president, Artur Mas, y el diputado de la CUP David Fernández se sitúan en polos ideológicos y estéticos opuestos y, sin embargo, el abrazo que se dieron durante el recuento de los votos el 9 de noviembre es la imagen de unidad que resume lo que supuso aquel día en Catalunya. «Lo reivindicaré el resto de mi vida», sentenció ayer Fernández.

Un abrazo que unos no quisieron entender en su contexto y que otros trataron de utilizar burdamente, pero que el director de “Vilaweb”, Vicent Partal utiliza para dar el punto final a su libro “Desclassificat 9N”, recogiendo un tuit de Mario Zubiaga, que escribió «Herri bat» junto a la fotografía del abrazo. La presentación del libro de Partal, un repaso a los trepidantes días que precedieron a la consulta catalana, fue la excusa para juntar a estos dos invitados de lujo en un Centre de Cultura Contemporànea de Barcelona (CCCB) lleno a rebosar. Una manera también de celebrar por todo lo alto los 20 años del primer diario digital catalán.

Con la duda de si al final del acto habría un nuevo abrazo, pero con mucha cordialidad, Mas y Fernández dieron cuenta de su sintonía personal y desplegaron un relato más o menos compartido sobre lo que supuso el 9N y la montaña rusa en que se convirtieron las semanas previas. «Entre otros factores, la actitud de David Fernández fue decisiva», aseguró, agradecido, Mas. «El día que tenga que declarar por estar imputado, no nos tendrá ni delante ni detrás, sino al lado, que es lo que tocará», respondió Fernández.

«Aquel día, la política catalana y la sociedad hicieron que David ganase a Goliat, demostramos que, aunque a veces nos metemos autogoles, somos capaces de hacer cosas bien», resumió el president, cuyo testigo fue recogido por Fernández, quien recordó que «quien hizo inevitable» el 9N no fue ni el Govern ni la CUP, «sino la gente que se mostró dispuesta a desobedecer». «Lo hicimos juntos los de la camiseta y los de la corbata, esa fue la clave», añadió Mas, en un tono bastante más distentido de lo habitual.

Dirigida por Partal, la conversación entre ambos representantes repasó algunos de los temas de actualidad, como es la insistencia, por parte de partidos de izquierda no independentistas (léase ICV-EUiA y Podemos), en convertir las elecciones del 27S en un plebiscito contra Mas y contra la derecha, obviando el tema nacional. «Si el eje solo es social y no sobre la independencia, hablaremos solo sobre los objetivos, pero no sobre los instrumentos, hablaremos de cómo gestionamos la escasez», afinó Mas.

Proceso autónomo

Fernández, a su vez, fue tajante al señalar que «no entrarán en un esquema» de separar cuestión social y nacional, ya que «no hay cuestión más social que la nacional y viceversa, porque un país es su gente». «El proceso catalán es autónomo, sin supeditaciones de ningún tipo», añadió el diputado de la izquierda independentista, quien aprovechó para recordar que «venimos de donde venimos, de un referéndum negado».

«Estoy escuchando cosas como que la independencia tendrá que ser de izquierdas o quedarnos con la autonomía. Pues bien, nos quedaremos con la autonomía, porque la independencia no es ni de izquierdas ni derechas», añadió Mas, quien, sin embargo, no quiso entrar a valorar el tema más candente dentro de su universo político: la consulta que ha dejado dividida a Unió y, de rebote, mantiene con respiración asistida la colición con Convergència.

Pase lo que pase con Unió y con CiU, la base soberanista mantiene su foco de atención (y preocupación) sobre las elecciones plebiscitarias. «¿Nos saldrán bien?», preguntó Partal. «Es lo que os pregunto a vosotros», contestó Mas en dirección al público. «La gente debe comprender que las elecciones plebiscitarias solo tienen sentido si es para resolver lo que no pudimos resolver el 9N», añadió. A su vez, Fernández recordó que «la mejor noticia es que depende de nosotros mismos». Más tajante, añadió que además tienen «la obligación ética y moral de que salga bien». En una línea parecida, el president añadió que «tenemos la oportunidad de escribir nuestra propia historia, algo a lo que no estamos acostumbrados».

Erigido en voz del soberanista de a pie, Partal preguntó a continuación qué deben hacer el 27S los que no son de ningún partido y simplemente quieren que el proceso independentista acabe bien. «Que ejerzan de puente entre partidos y si fracasan, que desborden a los partidos sin miedo». Pero a quien claramente iba dirigida la pregunta era a Mas, quien en los próximos días (primera cita, el próximo sábado) empezará a dar a conocer la fórmula que empleará para presentarse a las elecciones. Poco se sabe, pero se espera que el president deje en un segundo plano las siglas de su partido y trate de fichar a figuras de la sociedad civil para que le acompañen. Pese a la sugerencia de Partal, ayer no ofreció ningún avance, pero dirigiéndose precisamente a ese votante «sin partido», desveló alguna leve pista de lo que será su mensaje a partir de ahora: «Aun a riesgo de ser criticados, os debéis destapar públicamente».

Fue quizás lo más levemente noticioso en un acto amable en el que tanto Mas como Fernández se conjuraron para tratar de recuperar la ilusión soberanista parcialmente perdida y que, como no podía ser de otra manera, acabó con un nuevo abrazo.

DECLARACIONES

«La gente debe comprender y defender el sentido de las plebiscitarias»

ARTUR MAS

President de la Generalitat

«Es un honor contar con gente que, desde las antípodas, sabe ponerse de acuerdo»

VICENT PARTAL

Director de ‘Vilaweb’

«Si el eje solo es social, hablamos solo de los objetivos, no de los instrumentos»

ARTUR MAS

President de la Generalitat

«No hay cuestión más social que la nacional, y viceversa, porque un país es su gente»

DAVID FERNÁNDEZ

Diputado de la CUP

«La mejor noticia de todas es que ya sabemos que depende de nosotros mismos»

DAVID FERNÁNDEZ

Diputado de la CUP