El líder del PSOE, Pedro Sánchez, ha elegido su cuenta de Twitter (@sanchezcastejon) para enviar «un mensaje de confianza a la sociedad española. Confianza en el futuro, en la democracia y sus posibilidades».
A través de varios mensajes, Sánchez expone su posición actual tras el arranque de las conversaciones para la formación del nuevo Gobierno español. El candidato de la formación más votada, Mariano Rajoy, ya se ha reunido con el propio Sánchez, con Pablo Iglesias y con Albert Rivera.
Sánchez asevera que «el PSOE votará en contra de la continuidad del Sr. Rajoy o de cualquier otro candidato del PP a la presidencia del Gobierno» y «si Rajoy fracasa en su intento de formar Gobierno, el PSOE, como alternativa elegida por los españoles, asumirá su legítima responsabilidad».
«Dialogaremos, intentaremos llegar a acuerdos, trabajaremos para que haya un Gobierno de cambio progresista y reformista», ha anunciado Pedro Sánchez, para quien «la celebración de nuevas elecciones es la última de las soluciones, repetirlas supone el reconocimiento de falta de capacidad para dialogar».
Sin embargo, el PSOE traza una línea roja y rechaza tajantemente hablar o debatir sobre lo que denomina «cuestiones previas a la política, como es la integridad territorial de España». A su juicio, la «crisis de convivencia» en Catalunya sólo se resolverá «con la reforma constitucional federal que proponemos».