London Stock Exchange (LSE) y Deutsche Boerse, operadoras respectivamente de las bolsas de Londres y Frankfurt, han alcanzado un acuerdo formal para su «fusión entre iguales» que se llevará a cabo a través de una nueva sociedad, denominada UK TopCo, cuyo valor de mercado superaría los 25.000 millones de euros y que permitirá un ahorro anual de costes de 450 millones de euros, según han informado las compañías.
LSE y Deutsche Boerse, pasarán a convertirse en filiales de esta nueva entidad, que repartirá su sede entre la ciudad inglesa y la alemana. Según los términos del acuerdo alcanzado, los accionistas de LSE recibirán 0,4421 acciones de UK TopCo por cada título del gestor de la Bolsa de Londres en su poder, mientras que los accionistas de Deutsche Boerse obtendrán una acción de UK TopCo por cada acción de la alemana.
De este modo, asumiendo una aceptación del 100%, los actuales accionistas de LSE pasarán a controlar el 45,6% de la nueva sociedad, mientras que los accionistas de Deutsche Boerse controlará en el 54,4% de UK TopCo.
Inicialmente, el consejo de administración de la nueva sociedad estará formado por 16 personas, de las que LSE y Deutsche Boerse nombrarán a siete cada uno, mientras que el presidente de la Bolsa de Londres, Donald Brydon, se convertirá en presidente de UK TopCo, y Carsten Kengeter, consejero delegado de la Bolsa de Frankfurt, ocupará la misma responsabilidad en la sociedad combinada.
Un «comité de referéndum» ante un posible voto favorable a abandonar la UE
Por otro lado, las dos empresas anunciaron que con efectos a partir de la comunicación de este acuerdo han decidido establecer un «comité de referéndum» cuyo propósito será analizar las ramificaciones para la compañía de un potencial voto favorable a la salida de Gran Bretaña de la Unión Europea en el referéndum del próximo 23 de junio.
LSE y Deutsche Boerse nombrarán cada uno a tres miembros de este comité. Ambos entienden que la fusión está «bien posicionada» para ofrecer servicios a sus clientes independientemente del resultado de la votación, aunque admiten que «el resultado podría afectar al volumen y naturaleza del negocio».
Sin embargo, están trabajando sobre la base de que se mantendrán las actuales estructuras políticas. «Una decisión por parte del electorado de salir de la UE pondría en peligro este proyecto de Unión de Mercado de Capitales», añaden las empresas, aunque subrayan que «el resultado del referéndum no es una condición para la fusión».