El lehendakari Iñigo Urkullu ha señalado que trabajarán para «minimizar» los efectos del cierre parcial. En esta línea, ha subrayado que la industria va a seguir siendo «el motor de la economía vasca». Asimismo, ha puesto de manifiesto que «la recuperación, paso a paso, décima a décima, punto a punto», del sector industrial vasco «es un hecho».
Por su parte, el portavoz de Lakua, Josu Erkoreka, ha opinado que se han dado algunos «defectos y lagunas» en la gestión que se ha hecho de la planta de Arcelor en Zumarraga y ha afirmado que el cese parcial de su actividad puede «oxigenar» a plantas cercanas como la ACB de Sestao, cerrada, al menos, hast final de año.
En declaraciones a Radio Euskadi, ha asegurado que el anuncio de cesar parcialmente la actividad en Zumarraga tiene que ver con circunstancias generales como el dumping del acero chino o el precio de la energía, pero cree que «también hay otras más concretas».
En este sentido, ha precisado que en la gestión que se ha hecho en Zumarraga, «quizá no se ha puesto énfasis» en diversificar su producción. Erkoreka, que ha indicado que se van a «empeñar» en que la producción de acero «sea viable», ha apuntado que «es posible» que la decisión adoptada en Zumarraga «oxigene, de alguna manera a las plantas más cercanas», como la ACB en la medida en que «desaparece un competidor inmediato y cercano».
Por otra parte, se ha referido al ERE que se va a presentar en la planta de Tubos Reunidos en Amurrio y que, según ha explicado, «tiene que ver con el efecto que está teniendo en su negocio el bajo precio del petróleo».