Bajo el lema ‘Ezkerraldea-Kadagua Bizirik! Langilean borrokan!’, una marcha ha reclamado a las instituciones de la CAV que «pongan atención para sostener la industria» de Ezkerraldea. Cientos de personas han participado en la movilización que se ha celebrado en Barakaldo.

Han participado en la manifestación, con sus respectivas pancartas reivindicativas, trabajadores de las contratas de la ACB de Sestao, de las residencias de Bizkaia, de la planta de Tratamiento Mecánico Biológico (TMB) y del servicio de limpieza viaría y recogida de basuras de Trapagaran.

El secretario general de ELA, Adolfo Muñoz, "Txiki", ha exigido que «más allá de hipocresías» tengan una preocupación «real» por crear «empleo de calidad». Con un 18% de desempleo y 25.000 trabajadores en paro en Ezkerraldea, según ha resaltado, «la desaparición de la industria ha provocado una terciarización de la economía con un empleo precario».

De esta forma, se ha referido a la situación de la ACB de Sestao que es «un ejemplo de cómo se comportan las multinacionales cuando las leyes les permiten hacer lo que les da la gana» y ha asegurado que «no ha habido democracia» en la planta de Arcelor Mittal Sestao.

Ha señalado que, a pesar de que los trabajadores votaron el plan industrial presentado por la empresa, en la ACB de Sestao no ha habido democracia, sino «un chantaje» por parte de la multinacional y que «cuando la gente tiene encima de la cabeza una losa no se expresa con libertad».

Respecto al conflicto en la planta de Tratamiento Mecánico Biológico (TMB), con más de 80 días de huelga, ha criticado a las instituciones que han subcontratado a la UTE «por su desinterés» para «implicarse y buscar una solución digna a las condiciones de trabajo precarias» de los empleados.

También ha hecho referencia a las movilizaciones que las trabajadoras del sector de las residencias en Bizkaia están llevando a cabo por un convenio digno, con 18 días de huelga, y ha asegurado que «si en setiembre no cambia nada se irá a la huelga indefinida».

Sobre la huelga de basuras de Trapagaran, que se inició el 4 de abril, ha criticado la «inmensa incompetencia» del gobierno municipal (PNV) para lograr una solución y ha denunciado que trate de «neutralizar» la huelga con servicios mínimos y los informes de Sanidad que ordenan la limpieza de las calles.

Ha exigido al Gobierno Vasco que "no ponga al servicio del bloqueo de la negociación colectiva los servicios mínimos para que las huelgas sean ineficaces".