La primera detención se produjo pasadas las 14.00 horas en un local de hostelería de Mutiloa, donde uno de los empleados llegó en estado de embriaguez. El responsable del establecimiento solicitó presencia policial, ya que el empleado le amenazaba constantemente y se negaba a abandonar el local.
Cuando llegaron los agentes, tuvieron que extraer del establecimiento al empleado (identificado como F.A.A., vecino de Iruñea de 45 años), que se negaba resistiéndose y braceando constantemente.
Una vez en el exterior, F.A.A. prosiguió con las amenazas y llegó a zafarse de los agentes para acometer al responsable del local, por lo que finalmente fue detenido como presunto autor de un delito de desobediencia y resistencia.
La segunda detención por hechos similares tuvo lugar por la noche, cuando un varón identificado como A.R.C., mexicano de 19 años, se encontraba muy alterado y causando molestias en la Oficina de Atención Policial de la Plaza del Castillo. Tras ser desalojado de la misma, intentó entrar en repetidas ocasiones, llegando a empujar a los agentes, por lo que finalmente fue detenido.
Respecto a las detenciones por delitos de hurto, la primera se produjo pasada la medianoche, cuando un ciudadano que se encontraba en las cercanías de la Plaza de Toros se percató de que una persona estaba introduciendo la mano en uno de los bolsillos delanteros. En ese momento, la víctima comprobó que le acababan de sustraer un teléfono móvil de alta gama, por lo que comenzó a gritar.
En el lugar se encontraban varios agentes de Policía Foral, que localizaron y detuvieron al ladrón, identificado como M.Y., devolviendo el teléfono a su propietario.
La última detención se produjo también durante la noche. Una patrulla de paisano que se encontraba en la calle Estafeta observó a una persona, posteriormente identificado como C.I.F., en actitud sospechosa, que dirigía sus miradas constantemente hacia bolsos y mochilas de personas que se encontraban en el lugar
Los agentes decidieron seguirle de forma discreta, constatando que continuaba en la misma dinámica. Finalmente le dieron el alto junto a su vehículo, que se encontraba estacionado cerca de la Estación de Autobuses. En el interior, encontraron escondidos ocho teléfonos móviles cuya procedencia no pudo justificar, por lo que fue detenido como presunto autor de un delito de hurto.