Según ha podido saber IRUINDARRA, dos de los cinco presuntos violadores han sido trasladados de la prisión de Iruñea a otra cárcel, probablemente a la de Logroño. La medida se ha tomado para dotar de un mayor nivel de seguridad para los dos miembros de las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado. Los otros tres presuntos violadores permanecen en el centro penitenciario navarro, ya que el juez ordenó su ingreso sin fianza tras ver el vídeo de lo sucedido y después de que todos se negaran a prestar testimonio ante él.
En principio, el guardia civil y el militar han sido reubicados en un módulo especial que existe en la cárcel de La Rioja para policías y profesiones similares. Asimismo, la decisión de no mezclar a los otros tres detenidos con el resto de presos sería para prevenir posibles agresiones.
Desde la Guardia Civil se ha anunciado que se tomarán medidas contra el agente detenido y que no se reincorporará a su destino. En la práctica, y por ahora, sí que se le está dando un trato especial.