El Ayuntamiento ha realizado el balance de unas fiestas en las que se ha mostrado muy satisfecho del resultado, destacando el aumento de participación popular en las mismas y las sensibilización contra la violencia sexista. En este punto, Asiron quiere que la ciudad sea referente para otras ciudades del entorno y otros ayuntamientos del cambio. «Los pamploneses y pamplonesas han hablado de manera muy gráfica diciendo alto y claro que no van a permitir que este tipo de ataques tengan lugar en nuestra ciudad. Pamplona se ha convertido en un refernte en la lucha de la violencia sexista», ha asegurado el alcalde.
El alcalde ha destacado la transición que se ha producido en la programación cultural de la fiesta eliminando subcontratas y pasando a la gestión directa. «Esto ha dado lugar a una oferta de conciertos de gran calidad y dirigida a un público más diverso y que ha contado con más afluencia de público», ha señalado. También ha celebrado el éxito de los jaigunes organizados por los colectivos populares.
El Ayuntamiento también ha aportado otros datos de la fiesta, como que la participación de este año ha sido de 1,5 millones de personas. Comparativamente con otras ediciones, en esta se ha recogido un 6,6% más de basura. El acto que congregó a más gente fueron los fuegos, mientras que el número de corredores que han participado en el encierro ha caído un 1%.