La dimisión en bloque para protestar por la bajada de salarios deja prácticamente desarbolada la estructura de mando de la Policía Foral. Han dimitido de sus jefaturas todos los comisarios principales, comisarios e inspectores del cuerpo, salvo tres. Las dimisiones hacen referencia a sus jefaturas de área, división y brigada.
El motivo es principalmente económico y viene derivado de la aplicación de la Ley de Policías que se aprobó la pasada legislatura. En ella, se recogía un reequilibrio de salarios entre la plantilla, que suponía rebajas salariales para 266 mandos y subir los salarios al resto de agentes, que son 792.
Esta nueva Ley de Policías, que le ha tocado aplicar a la consejera María José Beaumont, salió adelante con el apoyo de la mayoría sindical compuesta por UGT, CCOO, ELA y AFAPNA a finales de marzo del año pasado, con el respaldo parlamentario de PSN, Geroa Bai, EH Bildu e I-E. Un mes después, hubo elecciones sindicales dentro del Cuerpo y ganaron representantes de los policías contrarios a esta nueva ley.
El portavoz de la nueva agrupación profesional que venció esas elecciones sindicales es Juantxo Zabalza. A preguntas de IRUINDARRA, Zabalza ha explicado que el motivo de la dimisión en bloque es económico. «Estamos en contra de la bajada de sueldos. Se trata de personas que han perdido ya poder adquisitivo y no compartimos que, para subir los sueldos de unos, haya que bajar los de otros».
Por otro lado, Zabalza considera que los salarios de Policía Foral son bajos si se comparan con otros cuerpos. En este sentido, subraya que las jefaturas de la Ertzaintza están mejor remuneradas que las de la Policía Foral a las que, con la aplicación de la nueva ley, se va a recortar el salario.
Los dimisionarios renuncian a sus jefaturas (en Tráfico, Atestados, Inspección, etc.) pero no a sus cargos de comisarios, comisarios principales e inspectores.