ATHLETIC - CELTA

«Con las portadas de los periódicos sólo suelo estar de acuerdo con la fecha y con el precio», sostenía una vez el galés John Toshack. Más franco se refirió a esa relación de amor-odio el histórico escocés Tommy Docherty, cuando se le ocurrió aquella genialidad de «siempre dije que debe haber un lugar para la prensa, pero todavía no lo han cavado». Sin purgatorio previo, sin preparación al parto, las dudas en torno al juego del equipo de repente han derivado en un debate de soslayo sobre la continuidad o no del entrenador. Todo comenzó con la pregunta de turno al ‘aló presidente Urrutia’ mensual de hace una semana y hoy deriva en informaciones que ahondan en esa posibilidad y hasta adelantan supuestas alternativas, una, el técnico argentino que hoy visita San Mamés. Y todo sin anestesia. ¿Recuerdan aquello de los entrenadores que pasado un tiempo empiezan a oler, como el pescado? Pues Ernesto Valverde ya puede empezar a taparse la nariz.

El Athletic cierra esta noche la jornada liguera previa al parón navideño. Y lo hace sabedor de que aquellos con los que compite por un buen puesto en la pole han despedido el año con victoria. Los tres puntos de hoy tienen una doble recompensa, o, al contrario, un doble castigo. No solo aguantar el tirón de sus rivales por los puestos europeos y no quedar relegado, por ejemplo, a dos victorias de Real o Villarreal en caso de derrota, sino de disfrutar de unas vacaciones en las que, a falta de otras buenas que no sean la llegada del Olentzero, la prensa deportiva no siga ahondando en las dudas incluido el día de Navidad en que los kioskos echan la persiana. En definitiva, que no ganar al Celta sería como echar más leña al fuego y quién sabe si acrecentar esa diferente visión que el vestuario y la prensa –como diría el periodista Dante Panzieri, «la opinión pública no es opinión. Es sentimiento»– tienen sobre la marcha de los leones.

El tono elevado, agrio y molesto que Raúl García esgrimió frente a los micrófonos de BeIN Sports tras la derrota ante el Betis y su «sois vosotros los que queréis que pase algo», dejaba paso anteayer a las palabras más sosegadas pero en la misma línea de Eneko Bóveda cuando en Radio Euskadi se quejaba de que «es una pena que haya esa corriente tan pesimista y negativa con el equipo, estando cerca de los objetivos y siguiendo adelante en Europa, pensando desde dentro además que puede ser un año muy bueno». Y añadía: «Esto viene de antes de empezar la temporada, no sé si por falta de novedades o por qué, pero llevamos una serie de años con una buena estabilidad y está costando conseguir ese ambiente de ilusión. Hemos superado a equipos muy buenos en San Mamés y no sé hasta qué punto se ha valorado».

El Celta, menos fiero a domicilio

Con esta marejada de fondo, el Athletic se la juega. Es así. El resto de marcadores de la jornada le empujan a superar a un rival nada sencillo, que lejos de Balaídos no anda tan fino –6 puntos de 21 posibles, recordaba Txingurri–, pero sigue siendo peligroso sobre todo en su faceta ofensiva, liderado por un Iago Aspas de dulce. A favor de los leones, su fortaleza al abrigo de los suyos –16 puntos de 21 posibles– y que torres más altas han caído este curso en San Mamés.

Otro encuentro en que ambos equipos se disputarán la iniciativa en el juego, la posesión de la pelota y donde ante rivales con también ese objetivo, el Athletic ha salido triunfador en casa. El Celta tiene cinco jugadores entre los cincuenta de la Liga con más pases hasta esta jornada; el Athletic tiene solo uno, Laporte. Y Beñat no aparece hasta la posición setenta. Sin embargo, los bilbainos rematan más veces por partido que los vigueses, pero los gallegos suman 24 goles a favor por 20 los vascos. El empuje y competitividad rojiblancos puede ser determinante. No obstante, y a sabiendas de que los celestes no lo pondrán fácil, los de Valverde deben aprovechar esa irregularidad de un rival que desde la temporada 2003-04 en Primera no había perdido más de un partido por tres o más goles. Errores defensivos que están penalizando a los de Eduardo Berizzo y que sitúan al Celta como el equipo que más goles ha encajado en jugadas de estrategia. Otro punto a favor del Athletic que veremos si sabe sacar provecho.

Los bilbainos despiden el curso liguero y quieren hacerlo con un regalo a su afición, pero de ellos y del resultado hoy dependerá que coman el turrón o que reciban carbón.