El RETAbet Bilbao Basket debe ahora ganar al Baskonia en Gasteiz en la última jornada de la primera vuelta de la Liga Endesa y esperar a que el MoraBanc Andorra pierda los dos partidos que le quedan hasta ese corte copero, mañana en su visita al Real Madrid y el domingo próximo en casa ante el Betis Energía Plus.

El de esta tarde en el Bilbao Arena ha sido un partido de claro dominio visitante que los «hombres de negro» han mantenido vivo 35 minutos gracias a la insistencia de los veteranos Alex Mumbrú (19 puntos, rebotes, 5 asistencias y 19 de valoración) y Axel Hervelle (15, 5 y 20) antes del descanso y de Ivan Buva (11 y 6) en el último cuarto.

No obstante, el equipo bilbaino ha vuelto a pagar la ausencia de algún base fiable y, aunque Carles Durán ha utilizado a los cuatro jugadores que tiene en esa posición, no han sido capaces de frenar al espléndido Bo McCalebb (12, 6 asistencias y 21) ni de ordenar como deben a sus compañeros. Si acaso lo han logrado unos minutos los que menos cuentan, Javi Salgado y Sergio Llorente, en otro mal partido de Jonathan Tabu (1/5 TC) y Tobias Borg (-5).

Con Salgado han cambiado la cosas para los vizcainos y con Llorente ya el choque ha retomado una dinámica de igualdad, sobre todo por el paso adelante de Mumbrú y Hervelle (27 y 39 entre ambos al descanso).

Solo la aparición de los ilustres veteranos locales ha frenado a un Gran Canaria imparable cerca de la canasta (17/20 T2, un 85%).

El enorme trabajo de Mumbrú y Hervelle, este sin fallo en los lanzamientos, ha ido recortando distancias y el RETAbet ha empatado el partido (44-46) 8 segundos antes de que con una brillante acción individual O'Neale dejase sobre la bocina el 44-46 al final de la primera mitad.

Han vuelto bloqueados de vestuarios los jugadores de ambos equipos, ya que apenas han logrado un 2-2 en los primeros cuatro minutos de la segunda mitad (46-48), pero el ‘Granca’ ha sido el primero que ha salido del letargo y ha retomado la máxima ventaja del partido, nueve puntos, al final del tercer cuarto (52-61).

Nada más comenzar el último cuarto los amarillos han aumentado la diferencias hasta los 12 puntos con un tiro libre de Aguilar tras antideportiva de Mumbrú (52-64).

Buva ha tratado de frenar la sangría y, ayudado por Lapornik, ha acercado a los suyos a seis puntos del final (60-66), pero la entrada en escena de Oliver con cinco puntos seguidos ha vuelto a dar una ventaja a los visitantes (62-73) que ya no han podido enjugar los de negro hasta un final del encuentro al que se ha llegado con la máxima diferencia del partido, 14 puntos (68-82).