Se refería así al recurso de alzada que presentó una opositora que demandaba, como otros, paralizar el proceso hasta revisar su prueba, si bien en su caso concreto la administración no contestó el requerimiento, ni en sentido positivo ni en negativo, lo que conllevaría la suspensión del proceso.
Al respecto, según ha asegurado a los periodistas el consejero a su llegada al Parlamento para comparecer en comisión, ya se ha firmado la Orden foral de rechazo de este recurso de alzada »precisamente por la falta de consistencia y porque no se ajusta, según nuestros servicios jurídicos, a la normativa, independientemente de lo que solicitaba».
«Incluso lo que solicitaba estaba mal planteado, porque son las plazas concretas a las que ella se refiere y no a toda la oposición lo que debería haber tenido que recurrir», ha asegurado Mendoza.
Por tanto, «ni peligra ni ha estado en peligro nunca» la OPE del pasado verano, en cualquier caso «hasta que hubiese un posible fallo judicial», aunque para el consejero, «los servicios jurídicos del departamento creen que no tiene fundamento y por eso hemos rechazado el recurso de alzada».