Según ha recordado el Consistorio en una nota, asimismo, en el pasado otoño se distribuyeron sacos de sal de 25 kilos a los centros escolares e igualmente se ha puesto este recurso a disposición de centros de salud y hospitales, para que puedan hacer acopio y mantener libres sus accesos, en caso de que sea necesario.

El Ayuntamiento dispone de nueve vehículos quitanieves con esparcidores de sal, además de barredoras y otros vehículos de las empresas contratistas de Obras en vía Pública, Limpieza y Jardines, que se adaptan a la situación de nieves y heladas, bien poniéndoles mecanismos específicos o bien estando a disposición del plan para transporte de sacos de sal para la limpieza de aceras, escaleras y paseos peatonales.

El plan de nieves y hielos moviliza los diferentes medios materiales y humanos con los que cuenta el Ayuntamiento según el nivel de alerta decretado. En él pueden participar hasta un máximo de 220 personas, contando, además, con la colaboración de voluntarios de la Cruz Roja y DYA si la situación lo requiriese.

Las mismas fuentes exponen algunos consejos para la actuación particular de los ciudadanos, más allá de la que realizan las administraciones públicas, ante situaciones excepcionales de frío y nieve como la anunciada.

Así, se recuerda la importancia de utilizar ropa y calzado adecuados para las bajas temperaturas y que es preferible llevar varias prendas ligeras superpuestas que una sola de tejido grueso, además de utilizar manoplas en lugar de guantes.

Asimismo, se señala la importancia de cubrirse la boca para evitar la entrada de aire frío en los pulmones y de protegerse cara y cabeza.

También aconseja suspender las salidas al monte y, si el frío es muy intenso, los deportes al aire libre.

En la web municipal se apuntan estos consejos, se establecen los deberes básicos de los vecinos y se dan algunos consejos para evitar problemas relacionados con el frío.

Se aconseja a la ciudadanía mantenerse informada en todo momento a través de los medios de comunicación y medios oficiales, y en su caso a seguir las recomendaciones que se vayan indicando.

Entre los objetivos del plan de emergencia figura garantizar el acceso a lugares de servicios públicos y privados, y facilitar el acceso de las vías de aporte de alimentos, productos sanitarios y energéticos.

Para atender a las más de 600 calles y plazas de la ciudad y limpiar más de 500 kilómetros de aceras, el Ayuntamiento ha agrupado las calzadas de la ciudad por áreas o zonas, de modo que haya vehículos en todas ellas que garanticen la limpieza de viales principales y cuestas.

Además, el plan recoge una especial vigilancia de las principales arterias viales para posibilitar una circulación adecuada. En el centro de control de nieves se podrán monitorizar las cámaras de tráfico de la ciudad para un mejor control de la situación.

Asimismo, el plan articula los mecanismos para proteger al ciudadano de posibles accidentes (caída de elementos de alturas, carámbanos, bloques de nieve) y proporciona la debida asistencia en caso de emergencia.