Por ello, la delegada de estudiantes del centro, Laura Venzal, ha pedido durante una comparecencia en el Parlamento «igualdad de oportunidades» y que los miembros de la Cámara antepongan las «soluciones concretas» a los «criterios políticos».

Por su parte, el estudiante de Medicina Roberto López ha solicitado que se vuelva a la convocatoria del año pasado ya que la nueva perjudica a la familias con rentas más bajas.

Tras afirmar que se está jugando con el futuro de los estudiantes, López ha sostenido que cuando «se ponen pegas en vez de facilitar los estudios», lo que se pretende es darles «un batacazo, dejarles tirados en medio del océano después tanto remar».

En la misma línea, el alumno de Periodismo Julen Sobejano ha asegurado que «no tiene sentido que quiten becas por el mero hecho de estudiar en una universidad privada» y ha lamentado que con la nueva convocatoria la continuidad de los estudios quede en el aire o se obliga a salir de comunidad para recibir una beca de mayor cuantía.

Edurne Ruiz, también de Medicina, se ha mostrado a favor de potenciar la universidad pública pero ha cuestionado que «se reduzcan las ayudas a las familias más desfavorecidas a mitad de carrera, sin previo aviso».

La alumna del mismo grado Iranzu Viguria ha solicitado «que se revisen los criterios» de la nueva convocatoria para evitar que «muchos abandonen la carrera» y ha criticado que haya más ayudas pero «a costa de quienes más lo necesitan».

Escuchadas sus opiniones, los grupos que sustentan el cuatripartito han coincidido en destacar la «verdadera necesidad» de aumentar la oferta de la Universidad Pública y defendido que los cambios planteados en la nueva convocatoria son «buenos» porque implican una redistribución del dinero para llegar «a más personas».

Además han indicado que el dinero público debe priorizar también lo público, aunque ello no significa que se pretenda castigar a ningún tipo de alumnado.

Sin embargo, el regionalista Alberto Catalán ha criticado una «medida sectaria» y «tan injusta y tan discriminatoria» para las familias con menos rentas, el socialista Carlos Gimeno ha dicho que «se penaliza dónde se estudia» y eso es «muy grave», y el popular Javier García ha instado a rectificar una medida que «solo afecta a las familias con menos recursos que quieren estudiar libremente un tipo de carrera».