A pesar de la premura en la convocatoria y de la lluvia, decenas de vecinos de Errekalde se han concentrado en la plaza para mandar un mensaje nítido a la Diputación vizcaina y al Ayuntamiento de Bilbo: «No nos rendiremos hasta que desaparezca el monstruo», en referencia al viaducto de la autopista que sobrevuela desde la década de los 70 el barrio.
Tras el último incidente, desde la plataforma ciudadana que reivindica la demolición han recordado que no es la primera vez que se produce un accidente más o menos grave, aunque afortunadamente en esta ocasión no ha habido heridos. «¿Hasta cuándo viviremos bajo este riesgo?», se han vuelto a preguntar quienes llevan décadas exigiendo a las instituciones que actúen.
Los vecinos de Errekalde han contado en la concentración con el apoyo de los ediles Bruno Zubizarreta (EH Bildu) y Amaia Arenal (Udalberri), que han portado también los carteles de «Autopista kanpora».