«La situación de encarcelamiento de la abogada vasca Arantza Zulueta ha sufrido una variación. Pero no a mejor, como se podría prever». Alfonso Zenon, letrado de la presa vasca, denunció ayer que el auto por el que el Juzgado Central de Vigilancia Penitenciaria ordenaba que pudiese tener cuatro horas de patio acompañada no ha supuesto una mejoría de sus condiciones de vida, sino al contrario.

Después de la tercera queja interpuesta ante el tribunal, la magistrada María de los Reyes Jimeno emitió un auto por el que instaba a la cárcel de Puerto III, donde permanece Zulueta, a permitir que pudiese pasar al menos cuatro horas con otras presas. La solución de Instituciones Penitenciarias ha sido trasladar a dos reclusas de primer grado desde Albolote (Valencia) y sacar al patio de la galería en la que se encuentra la represaliada vasca a otras dos presas en aislamiento. De este modo, se ejecuta el auto de la juez pero obligando a cinco personas a permanecer en un patio de 13 x 5 metros con una malla superior. «Si ya era difícil practicar algo de deporte en un patio tan pequeño, ahora es imposible con cinco personas. Y las demás condiciones pésimas del régimen de aislamiento siguen, un régimen que supone un grave ataque a los más básicos derechos fundamentales del ser humano», consideró Zenon.

No obstante, el abogado de Zulueta destaca que, aunque tarde y parcialmente, se ha reconocido la «ilegalidad» de la situación en la que se encontraba la presa vasca. Es uno de los elementos «positivos» del auto, fechado a 2 de febrero y que, aunque responde al espíritu de lo reclamado por el letrado (acabar con el aislamiento de Zulueta), incurre en algunas inexactitudes, según explicó el propio Zenon. Es por esto que en los próximos días tiene previsto presentar un recurso, tanto por el contenido del auto como por las consecuencias que este ha tenido para la presa vasca.

Entre las críticas de Zenon figuran que el auto no mencione que el módulo 15, en el que se encuentra aislada Zulueta, es conocido como «el de castigo», así como que se obvie que, en la práctica, las únicas presas (además de la vasca) que han estado en este módulo en los últimos tiempos han sido las que han sufrido el aislamiento.

Por último, el abogado recuerda que Zulueta lleva ya más de mil días en régimen de aislamiento, lo que ha motivado que el Relator de la ONU se interese por su caso.