Ilya U. TOPPER (Efe)
ESTAMBUL

La oposición kemalista impulsa las protestas contra el Gobierno turco

Un Congreso por la Justicia, inaugurado ayer con miles de participantes en la región de los Dardanelos, busca denunciar las arbitrariedades que se cometen bajo el estado de emergencia y promover los movimientos opositores de Turquía. La reunión, de cinco días de duración, ha sido organizada por el Partido Republicano del Pueblo (CHP), pero pretende formar una plataforma mucho más amplia, explicó Bülent Tezcan, vicepresidente del CHP.

«El Congreso de Justicia es una continuación de la Marcha por la Justicia que hicimos en junio, al caminar 420 kilómetros de Ankara a Estambul», dijo Tezcan. Con aquella marcha, el CHP, normalmente dedicado al trabajo parlamentario, pidió por primera vez una movilización ciudadana en la calle, fuera de los mítines electorales.

En su discurso de inauguración de ayer, el líder del CHP, Kemal Kiliçdaroglu, reconoció que «la gota que colmó el vaso» fue la condena de uno de sus diputados, Enis Berberoglu, en junio pasado a 25 años de prisión por haber canalizado a la prensa imágenes policiales de un envío de armas a Siria que fue acompañado por agentes de los servicios secretos turcos. La marcha de junio, de 25 días, cambió la imagen pública de Kiliçdaroglu, un antiguo funcionario de Hacienda hasta entonces considerado un dirigente honrado pero cauteloso y poco carismático.

El Congreso, que durará hasta el miércoles, pretende dinamizar el debate político entre intelectuales y a la vez servir de experiencia práctica, explicó Tezcan: «No es un acto de partido; el CHP sólo organiza este congreso, pero no usamos nuestro logo ni nuestras banderas; el lema es la palabra Justicia, como durante la marcha».

«Es un gran encuentro para crear una amplia plataforma, tanto para expresar quejas como para encontrar soluciones. Durante la marcha no se pudo hablar mucho. Hemos invitado a expertos de máximo nivel para hablar de la justicia en los juzgados, la enseñanza, la religión, los asuntos sociales, la prensa…», añadió.

En su discurso, Kiliçdaroglu se refirió a las consecuencias del estado de emergencia, decretado tras el fallido golpe de Estado de julio de 2016 y prorrogado desde entonces, algo que calificó de «golpe civil»: «Imagínese que usted da clase en una universidad y una mañana se levanta y le han quitado el cargo por decreto. Quiere recurrir, pero no hay cómo hacerlo, porque se ha prohibido ir a juicio. Hay que preguntar: ¿Es esto justicia?» dijo Kiliçdaroglu.

«Sin duda, la solución definitiva será política y tendrá que encontrarse en las urnas en 2019, en las próximas elecciones. Confiamos en que esta dinámica encuentre allí su respuesta», declaró Tezcan a la agencia española Efe.

 

Erdogan pide estar dispuestos a morir por la patria

Erdogan preguntó ayer a sus seguidores si están dispuestos a morir por la patria, al comparar la lucha contra los responsables del fallido golpe de estado de 2016 con una batalla selyúcida de hace mil años. «¿Estáis dispuestos a seguir los pasos de nuestros ancestros?», preguntó durante una ceremonia de conmemoración de la batalla de Manzikert, en la actual Malazgirt, situada en el extremo este de Anatolia. Fue en este lugar donde en 1071 el sultán Alparslan derrotó a los bizantinos, dando lugar a la llegada de pueblos túrquicos a Anatolia y finalmente a la creación del Imperio Otomano. Desde hace años, Erdogan pinta esta batalla como momento fundacional de Turquía, y su primer milenario, como horizonte para la planificación de sus políticas, tras el centenario de la república (2023) y el sexto centenario de la conquista de Constantinopla, en 2053.GARA